El verano está dejando temperaturas que baten récords en buena parte de España, con olas de calor que no solo afectan al día a día, sino que también condicionan la seguridad en la carretera. Con el asfalto alcanzando más de 60 grados en algunos tramos y los vehículos sometidos a un sobreesfuerzo constante, la conducción en estos días se convierte en todo un reto.
No hablamos únicamente de largas travesías vacacionales: autónomos, profesionales del transporte y cualquier persona que utiliza su coche para desplazarse al trabajo deben enfrentarse a un enemigo invisible, el calor extremo. Por eso, resulta imprescindible adoptar una serie de hábitos y precauciones que permitan mantener tanto al vehículo como al conductor en las mejores condiciones posibles.
4Elige bien el momento de viajar

Aunque no siempre es posible elegir, evitar las horas centrales del día es una de las recomendaciones más efectivas para minimizar riesgos. Conducir a primera hora de la mañana o al final de la tarde, cuando las temperaturas son más suaves, reduce el impacto del calor tanto en el coche como en el conductor.
Además, en estas franjas horarias suele haber menos tráfico en las carreteras, lo que también disminuye la probabilidad de accidentes y hace que el trayecto sea más cómodo y llevadero. Planificar con antelación es clave para lograr viajes más seguros y eficientes.