Recientes incidentes documentados en video, que muestran cómo operan estas redes de estafadores, han despertado nuevamente la preocupación sobre la importancia de llevar una cámara de tablero o «dashcam» en los vehículos para protegerse ante situaciones así. Esto deja al descubierto que las carreteras pueden ser peligrosas, y no solo por los riesgos habituales de conducir, sino también por la amenaza de personas que buscan provocar accidentes intencionadamente para obtener beneficios ilegítimos. Las autoridades han confirmado un aumento en los accidentes simulados, en los que los involucrados intentan responsabilizar a otros conductores para reclamar compensaciones de seguros.
Uno de los casos más recientes de estos accidentes simulados ocurrió en Belt Parkway, Nueva York, cuando una conductora llamada Ashpia Natasha circulaba en su todoterreno Acura el 16 de octubre. En un video captado por su dashcam, se ve cómo un Honda Civic se cruza en su carril de manera inesperada. Sin previo aviso, el conductor del Civic frena bruscamente hasta emitir humo, probablemente de los neumáticos o frenos, en lo que parece una maniobra diseñada para provocar una colisión. Aunque Natasha reaccionó rápidamente y logró frenar, el conductor del Civic continuó con la táctica y, en un acto inusual, puso el auto en reversa y se estrelló intencionalmente contra el vehículo de Natasha.
La secuencia del falso accidente que captó la dashcam
Los ocupantes del Civic, cuatro en total, salieron del automóvil simulando estar heridos, lo que parece haber sido una artimaña para hacer parecer que fueron las víctimas del choque. Según Natasha, el grupo la presionó para intercambiar la información del seguro, asegurándose de recogerla rápidamente y abandonaron el lugar con evidente prisa. Cuando Natasha intentó reportar el incidente, la policía le informó que, dado que no había lesiones aparentes y ambas partes habían intercambiado información, no acudirían al lugar. Todo esto generó confusión en la mujer, quien en ese momento no se dio cuenta de que estaba ante una situación de fraude.
Lo sorprendente vino al revisar la grabación de la dashcam que llevaba en su coche. En el video se puede observar cómo el conductor y el pasajero delantero intercambian lugares tras el choque, en lo que parece ser un intento de complicar la identificación de los responsables. Natasha descubrió este detalle posteriormente y se dio cuenta de que había sido víctima de un plan de estafa cuidadosamente orquestado. Ahora, con la ayuda de la grabación, está trabajando para llevar a los sospechosos ante la justicia.
No es solo este caso: el antecedente con un Honda Civic plateado
Otro video que circula en redes sociales muestra un incidente similar, también protagonizado por un Honda Civic plateado y captado por una dashcam. En este segundo caso, la presunta víctima de la estafa no logra detenerse a tiempo, y su vehículo termina chocando contra el Civic, que frenó intencionadamente. Una vez más, los sospechosos fueron recogidos por una SUV que los esperaba cerca, una táctica casi idéntica a la vista en el caso de Natasha. Las autoridades están investigando estos casos y buscan identificar a los posibles responsables, quienes parecen estar implicados en múltiples incidentes similares.
Estos casos dejan una lección importante: contar con una dashcam puede ser la diferencia entre defenderse eficazmente de acusaciones falsas o enfrentarse a largos y complicados procesos para demostrar la verdad. Natasha comenta que su compañía de seguros cubrió los daños, reconociendo que ella no tuvo la culpa gracias al video de la cámara. Estos dispositivos son cada vez más asequibles y accesibles, y pueden ser una inversión valiosa para quienes desean evitarse dolores de cabeza ante posibles fraudes. Como muestra la experiencia de Natasha, una dashcam puede ser una herramienta esencial para protegerse contra estos montajes y tener evidencia sólida ante situaciones imprevistas.