Los incendios forestales no solo suponen una amenaza para montes y poblaciones cercanas, también para quienes se encuentran al volante en el momento menos esperado. Conducir y de pronto ver cómo una columna de humo o incluso las llamas se interponen en la carretera puede ser una situación de enorme tensión. Mantener la calma, saber qué hacer y, sobre todo, qué no hacer, puede marcar la diferencia entre salir ileso o poner en riesgo la vida.
En un verano en el que los fuegos han arrasado miles de hectáreas en diferentes comunidades autónomas, la Fundación CEA, junto a Bomberos y Guardia Civil, ha querido recordar a todos los conductores que la prevención y la reacción adecuada son las mejores armas frente al peligro. Y es que no solo hablamos de salvar tu coche, sino de proteger tu vida y la de tus acompañantes.
4Qué hacer si el fuego se acerca demasiado

Si las llamas avanzan rápidamente y rodean tu posición, la Fundación CEA recomienda apagar el motor, dejar las luces de emergencia activadas y permanecer dentro del vehículo mientras llega ayuda, siempre que el fuego no esté impactando directamente sobre el coche. El habitáculo, aunque no es ignífugo, ofrece cierta protección inicial frente al humo y al calor.
En casos extremos, lo más recomendable es buscar refugio en zonas ya quemadas o en espacios sin vegetación, alejados del viento dominante, que es el que alimenta las llamas. El asfalto, en muchas ocasiones, puede convertirse en tu mejor aliado, ya que actúa como barrera natural contra la propagación del fuego.