BMW es una marca con un importante ADN deportivo, algo que demuestra por el modo en el que cuida su gama BMW M, la cual, por cierto, celebró en 2022 sus 50 años de existencia. Cinco décadas que nos han dejado algunos de los deportivos más excitantes de la historia y una legión de fanáticos dispuestos a invertir lo que haga falta para mejorar el rendimiento de sus monturas.
La firma bávara es consciente de ello y, aparte de fabricar versiones mejoradas de fábrica (identificadas por las letras CS), también cuenta con un catálogo de piezas (BMW Performance Parts) para que cada cual elija lo que quiera. No obstante, parece que en esta ocasión lo va a llevar a otro nivel.
La unidad de las imágenes equipa un conjunto de accesorios que será denominado ‘Track Day Package’, en referencia a las jornadas de conducción que muchos circuitos organizan para que los aficionados puedan disfrutar de la conducción en un entorno seguro. Actualmente se ofrece de fabrica un paquete denominado ‘Race Track’, formado por un techo en fibra de carbono o unos asientos específicos, además del paquete M Driver que aumenta la velocidad máxima a 285 km/h e incluye un curso de conducción con monitores profesionales, valorado en casi 1.900 euros; que no es mucho si tenemos en cuenta que el paquete Race Track cuesta casi 18.000 euros…

El Track Day Package lleva al BMW M2 a otro nivel
Desde su llegada en 2015, el BMW M2 ha sido uno de los grandes protagonistas en el catálogo de BMW Performance Parts; no en vano, unos meses después de su lanzamiento se presentó un paquete de accesorios específicos. Sin embargo, jamás nos habíamos encontrado con una configuración tan extrema como la que muestran estas fotografías de nuestros colegas de SHProshots.
Desde luego, la vista se va inevitablemente al espectacular alerón trasero con partes de alumunio, que recuerda en cierto modo al empleado en el Porsche 911 GT3. En este sentido, los más radical que habíamos visto en un BMW M de serie fue en el M3 GTS del año 2009. Una fórmula que se repetiría en el M4 GTS, en 2016. En el caso del BMW M2, todas las configuraciones que habíamos visto hasta ahora empleaban un alerón de una pieza realizado en materiales compuestos; incluso en preparaciones de especialistas como esta de AC Schnitzer.

También son diferentes los paragolpes respecto al M2 Coupé en el que está basado; no en el M2 CS, que presenta importantes diferencias, como un alerón integrado en la tapa del portón. Por otra parte, dentro de las BMW Performance Parts también se suelen incluir aumentos de potencia del motor. De serie, el M2 Coupé desarrolla 480 CV, mientras que el M2 CS, con el mismo bloque motor 3.0 biturbo de seis cilindros en linea, alcanza los 530 CV. De ahí que este paquete posiblemente lo lleva a una cifra intermedia, en torno a los 500 CV.
Galería de imágenes espía del BMW M2 Track Day Package
Fotos: SHProshots











