Todavía hay días en los que mi mente viaja al pasado mes septiembre, cuando la firma de Crewe nos invitaba a disfrutar por las carreteras más reviradas de los Alpes Suizos de la cuarta generación del sensacional Bentley Continental GT. Una criatura que esconde una poderosa mecánica híbrida enchufable para hacerlo tan rápido como eficiente y que ahora pasa por las manos del irreverente especialista alemán Mansory. Quien hace de las suyas, aunque con un toque más sutil.
Y es que si estás familiarizado con algunas de las creaciones de los chicos de Mansory no me vas a poder negar que este extraordinario Bentley Continental GT luce mucho más discreto que otras piezas que rozan la máxima excentricidad. Y aunque Mansory ha desvelado este proyecto sobre la base de la carrocería Coupé, confirman que todos estos accesorios están disponibles también para el Convertible, el conocido como GTC.
Mucha fibra de carbono para el Bentley Continental GT
Sobre la base del primer Bentley Continental GT con dos faros delanteros, los chicos de Mansory han colocado nuevos componentes estéticos y aerodinámicos que como no podía ser de otra manera, están fabricados en ligera fibra de carbono. Ahora bien, bajo petición del cliente, estos pueden ser de fibra de carbono forjada, material que el especialista alemán trabaja como pocos en el mundo. E imaginamos que también cobra acorde al trabajo realizado.
Entre splitter delantero, parrilla frontal, capó ventilado, faldones laterales, difusor trasero, alerón posterior y otros muchos componentes, puedes contar más de 14 piezas las que Mansory ha creado especialmente para la cuarta generación del Bentley Continental GT. Piezas que modifican de forma notable la imagen exterior de este majestuoso coupé, pero sin desvirtuar en exceso su elegancia y deportividad. Todo ello sin olvidarnos de que tienen su carácter funcional para generar un extra de carga aerodinámica en un deportivo que no es que la necesite como otros. Porque recordemos que pesa cerca de 2,5 toneladas en orden de marcha. El GTC incluso las supera.
Mecánicamente no hay sorpresas. Tampoco es que las necesite
En el exterior también llama la atención las nuevas llantas BY.5 con las que Mansory ha equipado a esta unidad. Llantas que tienen 22 pulgadas, que son forjadas y que el cliente puede personalizar. Lo mismo que también ocurre con los otros dos modelos que propone para el Bentley Continental GT y que son los llamados FD.15 y FS.23. En cualquier caso se equipan con unos neumáticos en medida 295/30 R22 delante y 335/25 R22 detrás. Y no porque de serie venga poco calzado con unos inmensos 275/35 R22 delante y 315/30 R22 detrás. Pero todo ayuda.
Con el objetivo de potenciar el comportamiento dinámico de este maravilloso Gran Turismo británico, los chicos de Mansory también ofrecen un módulo electrónico que controla sus suspensiones neumáticas, permitiendo acercar su carrocería al asfalto entre 20 y 30 milímetros adicionales respecto a las originales. Ahora bien, no hay más cambios en el chasis de los Bentley Continental GT, al igual que para su motor ofrecen exclusivamente un completo sistema de escape que debería añadir algunos caballos extra a ese 4.0 V8 Biturbo capaz de generar 600 CV y 800 Nm según sale de fábrica.
Mansory también personaliza el interior del Bentley Continental GT
Porque para su parte eléctrica no hay toque alguno, conservando un motor con 140 kW (190 CV) y 450 Nm, así como una batería con 25,8 kWh que le permite homologar una autonomía en modo eléctrico de 81 kilómetros. Y aunque los chicos de Mansory han mostrado este proyecto sobre un Bentley Continental GT Speed, lógico es pensar que también se podrán equipar en la versión ‘descafeinada’ que presentaron recientemente y que recordemos ofrecen un total de 680 CV y 930 Nm, cifras algo más comedidas que los 782 CV y 1.000 Nm de esos Speed, que aceleran de 0 a 100 km/h en 3,1 segundos y llegan hasta los 335 km/h. Así parece lógico que Mansory no se haya atrevido a tocar esa mecánica con etiqueta ‘0 emisiones’.
De la misma forma que tampoco se ha animado a desvelar el precio de todos y cada uno de estos exclusivos componentes que hacen aún más especial a semejante maravilla de la ingeniería que en España arranca en una cifra cercana a los 300.000 euros. Y para rematar, también aseguran que pueden personalizar el interior a tu gusto. Si es que antes los artesanos de Mulliner no han sido capaces de dar con la tecla. Cosa que dudamos.
Fotos: Mansory