Pocas cosas resultan tan molestas al entrar en el coche como tener que buscar el cable del móvil, desenredarlo, conectarlo y esperar a que el sistema reconozca tu dispositivo para poder usar Apple CarPlay o Android Auto. Y aunque cada vez más modelos nuevos vienen preparados para esta conexión inalámbrica de serie, la mayoría de los coches que circulan hoy en día siguen necesitando el clásico cable USB para acceder a sus funciones.
Pero hay una buena noticia: hoy puedes evitar esa molestia con un accesorio muy asequible que permite convertir la conexión por cable en una completamente inalámbrica. Se trata de unos pequeños adaptadores que se conectan al puerto USB del coche y permiten usar CarPlay o Android Auto sin necesidad de conectar físicamente el móvil. Y lo mejor es que no necesitas gastar una fortuna: algunos modelos cuestan menos de 10 euros y funcionan sorprendentemente bien.
1Para adeptos de Android y Apple: cómo funciona este accesorio milagroso
El principio es simple: el adaptador actúa como un puente entre el coche y el teléfono. Por un lado, se conecta al puerto USB del vehículo (como si fuera el móvil); por el otro, se comunica por Bluetooth y Wi-Fi con tu smartphone. Una vez emparejados, el sistema reconoce al teléfono automáticamente y activa la interfaz de Apple CarPlay o Android Auto como si estuviera conectado por cable.
El proceso de instalación no requiere herramientas ni conocimientos técnicos. Solo tienes que enchufar el accesorio, emparejar el móvil por primera vez, y a partir de ahí todo será automático. La mayoría de estos dispositivos se conectan de forma instantánea al arrancar el coche, sin intervención del usuario. Y gracias a la conexión Wi-Fi, la respuesta es fluida y sin apenas retrasos, incluso al usar apps exigentes como Spotify, Google Maps o Waze.
