Con los recientes cambios propuestos por la Dirección General de Tráfico (DGT), adelantar en carretera podría cambiar para siempre. Las normas que todos conocemos para sobrepasar a otros vehículos podrían desaparecer tal y como las hemos usado hasta ahora. Estas nuevas regulaciones buscan reducir accidentes y mejorar la seguridad vial, pero también implicarán una nueva forma de conducir en carreteras secundarias. Es momento de entender qué significa realmente esta transformación y cómo afectará a la vida diaria de los conductores.
La nueva normativa de la DGT establece que, en condiciones especialmente complicadas a nivel climatológico, como la presencia de hielo o nieve en la carretera, está prohibido el adelantamiento por el carril izquierdo, en el caso de que el hielo o la nieve entorpezcan la circulación para facilitar el acceso a los servicios de emergencia y vehículos de limpieza. Esta iniciativa tiene como fin reducir el número de siniestros viales causados por adelantamientos imprudentes en condiciones meteorológicas adversas.
1Limitación en carreteras secundarias
Uno de los puntos más destacados de la reforma es la limitación que afectará a los adelantamientos en carreteras secundarias. Según la nueva normativa, se prohibirá exceder el límite de velocidad en 20 km/h para adelantar en estas vías, algo que hasta ahora estaba permitido. Esta medida, aunque busca mejorar la seguridad, podría complicar el proceso de adelantamiento y aumentar el riesgo de colisiones frontales en carreteras estrechas o con visibilidad reducida.
Este cambio ha sido criticado por algunos expertos, que argumentan que la prohibición de aumentar la velocidad en tramos cortos para adelantar podría incrementar la duración de la maniobra y, por tanto, el riesgo de accidentes. Sin embargo, la DGT defiende que reducir la velocidad general y eliminar estos márgenes disminuirá el número de choques en tramos donde los conductores no tienen tiempo para reaccionar.