En cuestión de una semana tendrá lugar la legendaria 'subida a los cielos', es decir, Pikes Peak. Y en esta ocasión la firma de vehículos premium de Honda para Estados Unidos nos va a sorprender con nada menos que con cinco criaturas especialmente desarrolladas para la ocasión. Aunque también ha que decir que ninguno de ellos luchará por la victoria absoluta.
Para comenzar hablaremos de un Acura MDX Sport Hybrid, una versión de este SUV cuyo motor 3.5 V6 i-VTEC ha sido llevado hasta los 3,7 litros de cilindrada. Este se combina con nada menos que con tres motores eléctricos y con un cambio de doble embrague y siete velocidades.
La firma nipona asegura que esta criatura alcanza los 406 CV de potencia y los 475 Nm de par motor, un incremento significativo respecto a las versiones de calle, que se conforman con 325 CV y 390 Nm.
Con el fin de negociar las cientos de curvas, Acura instala una suspensión activa especialmente puesta a punto, una jaula de seguridad interior y ahorra peso prescindiendo de todos los elementos de confort a los que estamos acostumbrados.
Llevará dos Acura NSX
En Pikes Peak también veremos un Acura RDX A-Spec, el cual esconde un motor 2.0 i-VTEC Turbo que cuenta con un turbocompresor de mayor tamaño y con un compresor eléctrico, por lo que presume de poder generar 350 CV de potencia y 445 Nm de par motor.
Este llamativo SUV también cuenta con las medidas de seguridad necesarias para competir en esta carrera, unas suspensiones modificadas, llantas HRE de 19 pulgadas con gomas Pirelli, así como su sistema de tracción total SH-AWD ha sido modificado para enviar todo su potencial al eje posterior.
Dos serán los Acura NSX que se verán en Pikes Peak, destacando una unidad inscrita en la disciplina Time Attack y cuya mecánica híbrida deriva del NSX original, aunque debidamente potenciada gracias a dos turbos más grandes.
Esta criatura también luce llantas del especialista HRE, neumáticos Pirelli R-Composite y se ahorran 91 kilos respecto a las versiones de calle.
El segundo de los NSX está realmente próximo a la producción, pues será el 'coche cero' utilizado en Pikes Peak.
El último de los Acura que se verán este año en la 'subida a los cielos' será un TLX GT del equipo RealTime Racing, el cual esconde un motor 3.5 V6 Biturbo especialmente desarrollado para la competición y luce una aerodinámica sobrenatural para alcanzar en un tiempo récord los 4.302 metros a los que finaliza esta singular carrera.