¿Imaginas que no hicieran falta los controles de alcoholemia de la Guardia Civil? ¿Que fuera tu propio coche el que decidiera si estás en condiciones de conducir o no? Suena a ciencia ficción, pero podría convertirse en realidad en nuestras carreteras. Y no porque la Benemérita vaya a dejar de hacer su trabajo, sino porque una tecnología inteligente puede estar a punto de hacerlo por ellos.
Cada verano, las autoridades refuerzan su vigilancia para evitar tragedias al volante. Pero este año, se habla de algo que promete cambiar las reglas del juego: un pequeño accesorio que pronto podría ser obligatorio en todos los vehículos, y que podría salvar cientos de vidas al año… y hacer desaparecer los actuales controles de la Guardia Civil. ¿De qué se trata?
1Tecnología que salva vidas

El dispositivo ya funciona con éxito en varios países europeos. Hablamos de un alcoholímetro antiarranque, que impide que un vehículo se encienda si detecta alcohol en el aliento del conductor. Desarrollado por Dräger, empresa especializada en seguridad y tecnología médica, ha inspirado la campaña ‘Si bebes, no arrancas’, presentada en la Fundación MAPFRE.
El objetivo de la Guardia Civil es reducir la siniestralidad en carretera provocada por el consumo de alcohol. Y los datos respaldan la urgencia. Los accidentes con presencia de alcohol han aumentado un 20,3%, dejando más de seis mil víctimas. Con este dispositivo, se podrían evitar hasta 960 siniestros al año, salvar más de 80 vidas y reducir más de 1.200 heridos.