La seguridad vial es una preocupación constante de las autoridades de tráfico en todo el mundo, y la tecnología se convierte en una aliada clave para combatir los peligros en la carretera. En este contexto, la Dirección General de Tráfico (DGT) en España ha dado un paso significativo con la implementación de la nueva Ley sobre Tráfico y Seguridad Vial, que introduce cambios sustanciales, incluido el uso obligatorio de alcoholímetros antiarranque en ciertos vehículos.
A lo largo de las próximas líneas exploraremos los detalles y las implicaciones de esta medida que, al menos sobre el papel, busca aumentar la seguridad en las carreteras españolas.