Comprar un coche de segunda mano puede parecer la jugada perfecta para ahorrar sin renunciar a la movilidad. Los precios más bajos, la amplia variedad de modelos disponibles y el acceso a versiones mejor equipadas son algunos de los atractivos. Pero cuidado con cometer errores.
Aunque tenga sus añitos, la emoción por estrenar coche puede nublar el juicio. Entre vendedores hábiles, prisas por cerrar la operación y desconocimiento técnico, las meteduras de pata están a la vuelta de la esquina. Si estás pensando en hacerte con un coche usado, sigue leyendo: te contamos los 10 errores más comunes que cometen los compradores y cómo evitarlos.
7Comprar por impulso o solo por estética

Un coche reluciente por fuera no siempre está sano por dentro. Muchos compradores se dejan llevar por su diseño, color o equipamiento, y olvidan lo realmente importante: la mecánica. Un modelo más sobrio, pero bien cuidado, valdrá más la pena que uno llamativo con problemas bajo el capó.
No caigas en ese error. Tómate tu tiempo y evalúa con la cabeza, no con el corazón. Reflexiona aspectos como el uso que le vas a dar, su coste de mantenimiento o el consumo real de carburante y, con todo ello en mente, decide con criterio. Podría ser el más atractivo, pero no el que más te conviene.