Casi 25 años después de su debut, el la tercera generación del legendario Range Rover sigue capturando la admiración de los entusiastas del todoterreno de lujo. Ahora, una nueva compañía con sede en Estonia, Velvet Motorworks, se propone darle un renacimiento exclusivo, combinando restauración, modernización y personalización artesanal para compradores que buscan algo más especial y refinado que una simple unidad de colección.
El Range Rover L322: un clásico moderno

El Range Rover L322 se estrenó en 2001, con actualizaciones en 2006 y 2010, y nació bajo la supervisión de BMW, aunque para entonces Ford ya controlaba Land Rover. Desde su lanzamiento, el modelo destacó por sus líneas limpias, lujo discreto y presencia imponente, consolidándose como un todoterreno de referencia tanto en prestaciones como en estilo.
Para Mihkel Külaots, fundador de Velvet Motorworks, el L322 representa un recuerdo de juventud y un icono de ingeniería. “Era adolescente cuando lo vi por primera vez y me asombró la potencia y el lujo de esa máquina cuadrada. Ahora, con más de 20 años de historia, merece un desmontaje completo, una reconstrucción y un toque de carácter. No es solo restauración, es el resurgimiento de un clásico moderno”, comenta Külaots.
Una reinterpretación que respeta lo clásico

El proyecto de Velvet Motorworks va mucho más allá de una simple restauración. Si bien incorpora tecnología, estilo y mecánica renovados, mantiene la esencia del L322 original. La idea es dotar al vehículo de un enfoque retro, preservando los rasgos icónicos y actualizándolos con un diseño contemporáneo que, sorprendentemente, encaja a la perfección.
Entre las novedades exteriores destacan:
- Iluminación LED personalizada con gráficos circulares que recuerdan al diseño original.
- Parrilla rediseñada con listones verticales y parachoques inspirados en los todoterrenos clásicos.
- Ruedas más grandes y silueta elevada, que aportan presencia y robustez al conjunto.
El interior, aún no revelado, promete un acabado artesanal con materiales premium, combinando lujo clásico con Apple CarPlay, sistemas ADAS y tecnología de asistencia moderna, buscando un equilibrio entre confort contemporáneo y sensación de conducción analógica.
Motor y rendimiento mejorados

Todas las unidades del restomod L322 se basarán en modelos con motor V8 de 4.2 litros sobrealimentado, un propulsor fabricado por Jaguar y que originalmente capaz de entregar 406 CV de potencia. Velvet Motorworks planea aumentar la potencia mediante actualizaciones de hardware y software, complementadas con un escape activo seleccionable, para ofrecer una experiencia sonora y de conducción más emocionante.
La empresa enfatiza que el chasis y la base del vehículo se someten a una restauración completa antes de cualquier mejora de rendimiento, asegurando que se mantenga la conducción analógica característica del L322, mientras se incrementa la comodidad y la tecnología a bordo.
De los renders a la producción limitada

Por ahora, el Range Rover L322 de Velvet Motorworks solo existe en renders 3D, realizados por Nils Piirma, un artista CGI que ha trabajado previamente con marcas de supercoches como Koenigsegg y Genesis. Aun así, la compañía planea tener el primer prototipo listo para mediados de 2026, con entregas a clientes previstas para finales del mismo año.
La producción será limitada y completamente personalizada, realizada en Estonia, asegurando que cada ejemplar sea único. Velvet Motorworks mantiene en secreto el precio, pero ya acepta solicitudes de interesados, anticipando una demanda selecta entre coleccionistas y aficionados al lujo todoterreno.
La esencia del restomod: lujo clásico con tecnología moderna

El proyecto de Velvet Motorworks refleja la tendencia creciente del restomod, donde los vehículos clásicos se actualizan con la última tecnología sin perder su carácter histórico. El L322 renacido combina lo mejor de ambos mundos: diseño icónico, conducción analógica, potencia mejorada y confort moderno, creando una alternativa única para quienes desean un Range Rover clásico pero con prestaciones y equipamiento del siglo XXI, aunque precisamente no basado en los Classic como hacen otros especialistas.
Con este restomod, Velvet Motorworks demuestra cómo un modelo emblemático puede trascender generaciones, ofreciendo a los aficionados la oportunidad de poseer un Range Rover exclusivo, personalizado y técnicamente avanzado, manteniendo la esencia de uno de los todoterrenos más icónicos de principios de siglo.
Fotos: Velvet Motorworks
















