No descubrimos nada nuevo si decimos que las ferias del automóvil en Europa están de capa caída. De la misma forma que a nadie se le escapa que organizar y reunir un número importante de marcas para que expongan sus novedades, es cada vez más difícil y costoso.
Un logro, que una vez más, ha conseguido el tradicional Salón Internacional del Motor de la Fira de Barcelona. Una muestra que está considerada a nivel mundial como históricamente prestigiosa, ya que se celebró por primera vez en el Palacio de Bellas Artes de esta ciudad en 1919. En esta ocasión, en su 43 edición y bajo la denominación de Automobile Barcelona, la organización logró reunir 29 marcas de primer nivel en el recinto ferial de Montjuïc, y será recordada como la de la reafirmación de la electromovilidad y la ofensiva de los coches ‘made in China’. De hecho, marcas ya consolidadas en España como BYD, MG, Omoda o Jaecoo, entre otras, se volcaron en ofrecer su presente y futuro a unos 350.000 visitantes, dispuestos a comparar en un mismo espacio modelos, soluciones, necesidades y precios de los vehículos procedentes del gigante asiático.
Las marcas chinas han tenido su protagonismo en Automobile Barcelona

En este punto hay que destacar que los automóviles de origen tecnológicamente chinos suponen en la actualidad el 9 por ciento del mercado y según un estudio realizado por Carwow, las inquietudes de los posibles compradores, referente a las calidades han disminuido de forma notable. Así, mientras en el pasado año estaba en un 37 por ciento de desconfianza, en el ejercicio actual ha bajado al 23 por ciento y además, la mitad de los encuestados no descartan hacerse con un coche chino que tenga buena calidad y menor precio. De ahí que el presidente del Automobile, Enrique Lacalle, considere que, para competir y renovar el parque de vehículos en España, es necesario un cambio de las reglas del sector en el automóvil.
Asimismo, y teniendo en cuenta que, según la organización, un 70 por ciento de los automóviles que se venden en nuestro país estaban presentes en el salón, merece la pena destacar lo último de Alpine, Renault, Ford, Volvo, Cupra, Tesla, Hyundai, Suzuki o Ebro con la primicia mundial del s400. La española Seat, celebró su 75 aniversario exponiendo 75 coches que representaban desde el inicio de la España sobre ruedas, a la electrificación actual. En resumen, fue un homenaje a un apasionante pasado y un fructífero presente donde la movilidad y conectividad requieren nuevos hábitos.