El crecimiento del sector automotriz está íntimamente ligado a los cambios tecnológicos y a la evolución de las demandas del mercado. Entre estos cambios, la revolución del coche eléctrico se presenta como una oportunidad singular para las empresas de recambios y piezas recuperadas.
El coche eléctrico: Una nueva era para las piezas recuperadas
Recomotor, una empresa pionera en la recuperación y reutilización de piezas automotrices, ha valorado el impacto del coche eléctrico en su sector. Su CEO, Jan Amat, ha afirmado que, lejos de ser una amenaza, el avance de los vehículos eléctricos puede proporcionar un «crecimiento sin precedentes» para el sector de las piezas recuperadas.
¿Por qué el coche eléctrico no representa una amenaza?
Es natural que haya inquietud entre los inversores sobre cómo los vehículos eléctricos afectarán al mercado de recambios. Sin embargo, Amat sostiene que la diferencia en la estructura y funcionamiento de los coches eléctricos no implica la desaceleración del mercado de piezas recuperadas. Las suspensiones, sistemas de frenos, y componentes electrónicos seguirán siendo relevantes. De hecho, estas piezas podrían tener la misma demanda en el mercado de segunda mano que en los vehículos de combustión.
Nuevas oportunidades en la recuperación de componentes
Uno de los puntos más destacables es que los coches eléctricos introducirán un conjunto de componentes innovadores. Baterías, cargadores, y sistemas de gestión electrónica son solo algunos ejemplos de partes que no solo aumentarán la diversidad de piezas recuperadas, sino que también abrirán nuevas vías de negocio. Tal como indicó Amat, la inclusión de estos elementos en el catálogo de piezas recuperadas ofrecerá nuevas oportunidades de reutilización en el mercado.
La gestión de residuos electrónicos: Un desafío convertido en oportunidad
En una era marcada por la tecnología, la correcta gestión de residuos electrónicos se ha convertido en una preocupación esencial. Los vehículos eléctricos poseen un 30% a 50% más componentes electrónicos en comparación con los vehículos de combustión, lo que incrementa la necesidad de manejarlos adecuadamente.
Recomotor pone énfasis en que este desafío también puede transformar el sector, dado que la reutilización de estos componentes no solo ayudará a reducir el impacto ambiental, sino que también evitará la acumulación de desechos electrónicos en nuestros vertederos.
La ‘segunda vida’ de las baterías: Más allá de la automoción
Una de las tendencias más prometedoras es la reutilización de baterías en aplicaciones estacionarias. Amat subraya que, además de reacondicionar baterías para su uso en vehículos, hay una creciente demanda para emplearlas en almacenamiento de energía. Esto prolonga la utilidad de estas baterías, al mismo tiempo que eleva el sector hacia nuevas fronteras en energías renovables.
Sostenibilidad y legislación: Impulso para el sector de piezas recuperadas
Con la inminente obligación de incorporar un 25% de piezas reutilizadas en la fabricación de vehículos a partir de 2025, la legislación europea desempeñará un papel crucial en el fomento de la sostenibilidad. Esta normativa no solo beneficiará al medio ambiente, sino que también potenciará la importancia de las piezas recuperadas en la cadena de suministro de la industria automotriz.
Preparación para el futuro
Recomotor se posiciona como un líder en esta transformación, simbolizando un compromiso firme con la movilidad sostenible. Jan Amat enfatiza que la empresa está preparada para afrontar este reto y contribuir a una industria automotriz más ecológica.
Ventajas del uso de piezas recuperadas en el sector automotriz
Sostenibilidad ambiental
La reutilización de piezas no solo ayuda a reducir desechos, sino que también minimiza el uso de recursos naturales. Este proceso contribuye a la sostenibilidad ambiental y a la mitigación del cambio climático, aspectos cada vez más relevantes para consumidores e inversores.
Ahorro económico
La utilización de piezas recuperadas puede representar un ahorro significativo para los talleres y los consumidores. Al optar por recambios de segunda mano, se pueden reducir considerablemente los costos de reparación, lo que se traduce en un mercado más accesible y competitivo.
Innovación y nuevas tecnologías
El sector de piezas recuperadas no se detiene. Con el crecimiento de la tecnología, las empresas están invirtiendo en mejores procesos de reacondicionamiento y en el aprovechamiento de componentes que antes se consideraban residuos. Esto fomenta la innovación dentro del sector automotriz.
Desafíos a superar
A pesar de sus innumerables ventajas, el sector de piezas recuperadas también enfrenta retos. La percepción pública de las piezas usadas, la calidad de ciertos recambios, y la competencia con recambios nuevos son solo algunos de los obstáculos que las empresas deben sortear.
Educación del consumidor
Una parte fundamental de la solución radica en la educación del consumidor. Es esencial informar al público sobre los beneficios y la calidad de las piezas recuperadas, asegurando que entiendan que estas opciones son seguras y viables tanto económica como ambientalmente.