El mercado australiano de pick-ups está a punto de recibir una sacudida eléctrica. KGM (anteriormente conocida como SsangYong) acaba de presentar el Musso EV, su primera incursión en el territorio de los pick up eléctricos, un segmento prácticamente virgen que promete ser el próximo campo de batalla de la industria automovilística. El Musso no es un recién llegado. Este modelo lleva décadas siendo el pick-up recreacional de referencia en Corea del Sur, con una reputación ganada por robustez y fiabilidad. Ahora, esa herencia se traslada al universo eléctrico sin perder un ápice de su ADN todoterreno.
El Musso EV mantiene la filosofía de diseño «Powered by toughness» (potenciado por la resistencia), pero añadiendo elementos high-tech que delatan su naturaleza eléctrica. La parrilla tridimensional con patrón de puntos horizontales integra luces LED diurnas y direccionales. El capó esculpido y la defensa inferior plateada aportan ese carácter robusto que los compradores de pick-ups esperan.
Además, los pasos de rueda prominentes, las molduras laterales y esas líneas de carácter que conectan visualmente la cabina con la caja de carga consiguen hacer que un pick-up de doble cabina parezca una unidad y no dos vehículos soldados en el centro. En la parte trasera, el logo KGM en relieve sobre el portón y las luces LED combinadas cierran un diseño que busca la funcionalidad.
Un interior muy tecnológico y confortable
En el interior es donde KGM más se ha salido del guion tradicional de los pick-ups. El concepto «Slim & Wide» del habitáculo se traduce en un panel de instrumentos panorámico que integra dos pantallas de 12.3 pulgadas: una para el cuadro digital y otra para el sistema de infoentretenimiento. El cerebro de todo es el sistema Athena 2.0 de nueva generación, que garantiza una usabilidad más rápida e intuitiva. Apple CarPlay y Android Auto llegan de serie.
Y a nivel de confort llegan los elementos más destacables: asientos delanteros eléctricos de 8 posiciones con calefacción, ventilación y ajuste lumbar eléctrico. Los asientos traseros no se quedan atrás: configuración 60/40 con 80 mm de deslizamiento, 32 grados de reclinación y calefacción en las plazas exteriores. La iluminación ambiental y el volante de cuero calefactado añaden el toque premium.
La caja de carga del Musso EV mantiene las dimensiones del modelo de combustión: 1.345 mm de largo, 1.515 mm de ancho y 510 mm de profundidad. No son cifras espectaculares, pero cumplen sobradamente para tablas de surf, bicicletas o el equipo de camping del fin de semana.C Cuenta con ocho puntos de anclaje que permiten asegurar la carga mientras que el revestimiento moldeado de serie protege la caja de arañazos y golpes. Un detalle inteligente: iluminación LED en la caja para cargar o descargar cuando cae la noche.
Dos opciones de tracción
Además como elemento sorprendente dispone de suspensión trasera autonivelante de serie, un sistema, que normalmente se reserva para pick-ups mucho más caros, que ajusta automáticamente la altura de marcha cuando lleva carga pesada o remolca un tráiler. El resultado: estabilidad mejorada, mejor comportamiento dinámico y menos preocupaciones cuando se cargan hasta los 905 kg de capacidad en la versión 2WD o enganchas un remolque de hasta 1.800 kg.
Para la parte de la propulsión KGM ha optado por baterías LFP (fosfato de hierro y litio) de 80.6 kWh, tecnología que destaca por su durabilidad y resistencia al calor. La versión 2WD monta un motor frontal de 152 kW (206 CV) y 339 Nm, suficiente para mover con soltura sus más de 2.100 kg. La variante AWD añade un segundo motor idéntico en el eje trasero, elevando la potencia combinada a 266 kW (361 CV) y 630 Nm.
La autonomía oficial es de 420 km en ciclo WLTP combinado para la versión 2WD, mientras que la AWD se queda en 380 km. Con un cargador de 300 kW DC, el Musso EV recupera del 20% al 80% en aproximadamente 31 minutos. Con un cargador más habitual de 100 kW, ese tiempo se extiende a unos 46 minutos. La carga doméstica AC de 11 kW completa la batería en unas 10 horas y 20 minutos, perfecta para cargar durante la noche.
También cuenta con función V2L (Vehicle-to-Load) que permite usar la batería del vehículo para alimentar equipos externos como neveras portátiles, herramientas eléctricas o cualquier equipo de camping. Para aprovechar al máximo la energía de la batería, cuenta con sistema de frenado regenerativo ajustable en tres niveles mediante levas en el volante, y el modo inteligente adapta automáticamente la recuperación de energía según la orografía y las condiciones del tráfico.
El pick up coreano remata sus características con paquete de seguridad muy generoso: 8 airbags, frenado de emergencia autónomo, asistente de mantenimiento de carril, alerta de colisión frontal, control de estabilidad, asistente de estabilidad de remolque y sensores de aparcamiento delanteros y traseros.
Todo esto por un precio que sin duda es sorprendente para las cifras que se manejan en España, pues los 60.000 dólares australianos como precio de partida son poco más de 33.000 euros al cambio, un coste que ya nos gustaría ver por aquí. Con 7 años de garantía ilimitada en kilometraje y 10 años para la batería, la propuesta de valor de la marca coreana es lo más interesante.
Imágenes KGM Musso EV
Fotos: KGM
