El gigante automovilístico Stellantis tenía buena parte de su fe depositada en el electrizante Dodge Charger Daytona, un impresionante ‘muscle car’ 100% eléctrico y nacido sobre la arquitectura STLA que ya se vende en Estados Unidos, mercado donde precisamente su acogida no ha sido la mejor del mundo. Porque quien se ha puesto al volante de esta criatura ha sido bastante crítico al ensalzar defectos como su tamaño, su peso… Y ahora los chicos de Edmunds han querido romper una lanza a su favor al compararlo con la versión más poderosa del exitoso Tesla Model 3, la conocida como Performance, en una de sus famosas carreras U-Drag.
Como seguro ya sabes, estas carreras U-Drag cuentan con una aceleración de cuarto de milla, una curva de 180 grados y otro cuarto de milla. De ahí que salgan a relucir detalles como su velocidad de aceleración, su potencia de frenado, su paso por curva… Pero antes de todo comencemos diciendo que en Estados Unidos un Tesla Model 3 Performance cuesta 56.630 dólares (50.255 euros), mientras que un Dodge Charger Daytona Scat Pack, que por cierto es la única versión que ha dejado la casa americana para esta temporada al eliminar de la oferta el R/T de acceso, cuesta 70.190 dólares (62.285 euros). En la primera cifra el de California barre a su contrincante, que cierto es luce una imagen más exclusiva.
El Dodge Charger Daytona es más poderoso, pero también más grande y pesado
Debajo de la carrocería del Tesla Model 3 Performance hay dos motores que generan 517 CV de potencia y 740 Nm de par motor, cifras que se encuentran por debajo de los 637 CV de potencia y 850 Nm de par motor que generan las dos máquinas que utiliza el Dodge Charger Daytona Scat Pack. Sin embargo, la cosa se iguala cuando analizas que pesan 1.837 y 2.709 kilos respectivamente. Y es que hay que reconocer que ese ‘muscle car’ eléctrico no es ningún peso pluma a pesar de ser capaz de acelerar de 0 a 60 millas por hora (96 km/h) en solo 3,3 segundos. Tiempo que el de California rebaja hasta los 2,9 segundos.
A pesar de tener más potencia, ese lastre pasa factura al Dodge Charger Daytona Scat Pack, que en la práctica acelera peor que el Tesla Model 3 Performance. Este último llega antes a la curva, en la que hace valer su ligereza y su menor tamaño para encarar la recta de meta antes que su adversario. Y lo hace en ambas carreras, donde los chicos de Edmunds midieron mejores datos para el modelo de California, haciendo que Stellantis tenga que echar un vistazo a su ‘muscle car’ eléctrico si quiere ahondar en los corazones de sus clientes al otro lado del océano.
