El futuro de la producción de vehículos en el Reino Unido se ve amenazado por la posible detención de la misma en menos de un año, según ha advertido Maria Grazia Davino, responsable del negocio de Stellantis en el país. Estas declaraciones se dieron durante un evento de la Sociedad de Fabricantes y Comerciantes de Motores en Londres.
Requisitos del Gobierno británico para fabricantes de vehículos
Medidas urgentes para estimular la demanda de coches eléctricos en el Reino Unido
La directiva de Stellantis ha hecho hincapié en la necesidad de que el Gobierno británico tome medidas para estimular la demanda de coches eléctricos. En este sentido, el Ejecutivo local ha impuesto a los fabricantes de vehículos la obligación de vender un porcentaje mínimo de automóviles totalmente eléctricos, bajo amenaza de enfrentarse a cuantiosas multas en caso de incumplimiento.
Normativa sobre vehículos eléctricos en Reino Unido
El Gobierno británico ha establecido que las marcas de coches deberán vender al menos un 22% de vehículos eléctricos en 2024. Esta exigencia se incrementará de forma progresiva en los años venideros, llegando al 100% en 2035. Además, se prevé la prohibición de la venta de coches híbridos nuevos para ese mismo año.
Consecuencias para Stellantis en Reino Unido
Stellantis, como fabricante de vehículos europeo, se enfrenta al reto de adaptarse a estas nuevas regulaciones. Actualmente produce camionetas eléctricas en su planta de Ellesmere Port, y tiene planes de comenzar la fabricación de camionetas eléctricas en su fábrica de Luton en 2025.
Impacto en el mercado financiero
A pesar de la incertidumbre que rodea a la producción de vehículos en el Reino Unido, las acciones de Stellantis se mantienen estables en la sesión de este martes en la Bolsa de Valores de Milán, cotizando alrededor de 19,46 euros por título. Este fabricante ha logrado incrementar su capitalización en más del 28% en el último año.
En resumen, la industria automotriz en el Reino Unido se encuentra ante un panorama de cambios significativos impulsados por la transición hacia la movilidad eléctrica. Stellantis y otros fabricantes deberán adaptarse a las nuevas regulaciones si quieren mantener su presencia en este mercado en constante evolución. La colaboración entre el sector privado y las autoridades gubernamentales será fundamental para lograr una transición exitosa hacia una movilidad más sostenible y respetuosa con el medio ambiente.