Las aplicaciones de navegación se han convertido en un copiloto imprescindible para millones de conductores. Waze y Google Maps no solo sirven para llegar antes a destino o esquivar atascos, sino que ofrecen información en tiempo real sobre incidencias en la vía, accidentes, obras… y también sobre la presencia de controles policiales. Una función que muchos usuarios consideran útil, pero que genera un profundo malestar entre las autoridades de tráfico.
En España, la Guardia Civil lleva años mostrando su preocupación por el uso que se hace de estos avisos, especialmente en fechas sensibles como Nochevieja. Una noche marcada por celebraciones, consumo de alcohol y un despliegue especial de controles destinados a evitar tragedias en la carretera. En ese contexto, la ‘colaboración’ entre conductores que proponen estas apps no siempre se ve con buenos ojos.
1El aviso de controles: ¿cómo funciona realmente?
Tanto Waze como Google Maps permiten señalar la presencia de controles policiales en un punto concreto de la carretera. En el caso de Waze, es una de sus señas de identidad: los propios usuarios avisan a la comunidad con solo pulsar un botón. En Google Maps, la función llegó más tarde, pero se ha integrado de forma similar gracias a la información compartida por los conductores.
El sistema es sencillo y efectivo. Si un usuario detecta un control, lo marca en la aplicación y el resto recibe un aviso visual o sonoro al aproximarse. El objetivo inicial de estas funciones era informar de posibles retenciones o ralentizaciones del tráfico; pero en la práctica, muchos lo utilizan para evitar controles de alcoholemia o drogas, algo que preocupa seriamente a la Guardia Civil.








