¿Cuántas veces has pensado «mi coche está perfecto, seguro que pasa la ITV sin problema»? Miles de conductores llegan confiados a las estaciones de inspección… y salen con un resultado desfavorable. La ITV no es una simple revisión, es una radiografía completa del estado real del vehículo. Y cuando el técnico se asoma bajo el capó o conecta el lector de diagnóstico, la verdad sale a la luz.
La mayoría de los fallos que provocan un ‘no apto’ dan señales antes de romperse del todo. Sin embargo, seguimos ignorándolas. Eduardo, técnico de ITV con más de 15 años de experiencia, nos confiesa que uno de cada cinco coches no la pasa a la primera. «No es cuestión de mala suerte, es cuestión de prevención», asegura. Y en este artículo, veremos a qué se refiere.
5Los fallos ocultos que muchos ignoran
Uno de los sistemas menos conocidos por el conductor medio es el EVAP, encargado de gestionar los vapores de combustible. Cuando huele a gasolina o se enciende la luz de motor sin otros síntomas, puede haber microfugas o una tapa del depósito mal cerrada. “Hay coches que vuelven a casa para apretar la tapa y regresan, y pasan la ITV sin problemas”, se ríe Eduardo.
Lo cierto es que, según datos de diagnósticos con herramientas como Carly, 7 de cada 10 coches tienen al menos una avería registrada y 1 de cada 3 tiene una crítica. Esto significa que muchos vehículos circulan con fallos que el conductor ni siquiera conoce. Por eso, cada vez más estaciones recomiendan un escaneo previo antes de acudir a la ITV.
