¿Viajas en familia? Entonces seguro que piensas en destinos, paisajes y momentos compartidos. Sin embargo, existe un aspecto que debería estar siempre en primer plano: la seguridad infantil en el coche. No importa si la escapada es corta o el viaje nos lleva a la otra punta del país, proteger a los más pequeños durante el trayecto es una responsabilidad que no entiende de tiempos ni estaciones del año.
Olga, técnico en seguridad vial infantil y con más de una década de experiencia asesorando a familias, lo resume claramente: “El mejor viaje es aquel en el que llegamos todos sanos y tranquilos”. Y para lograrlo, recuerda cinco consejos esenciales válidos durante todo el año, sea otoño, invierno, primavera o verano. Cinco pautas que conviene interiorizar para que cada desplazamiento sea seguro como placentero.
4El ajuste del arnés lo cambia todo
Otro aspecto fundamental para la seguridad es el arnés. El sistema de ajuste debe quedar lo más ceñido posible al cuerpo del niño, sin holguras, y las correas tienen que situarse siempre a la altura correcta, generalmente por encima de los hombros. Porque aunque pueda parecer un detalle menor, marca una enorme diferencia en caso de frenazo o impacto.
Para comprobar si está correcto, Olga suele utilizar un sencillo truco: «Si puedes pellizcar la cinta del arnés entre los dedos, aún está demasiado flojo». Además, recuerda que debes revisar las correas y anclaje cada vez que el niño se abrocha, porque no siempre llevará la misma ropa ni mantendrá la misma postura. En trayectos cortos, solemos relajarnos, y es justo ahí cuando vienen los errores.








