El Range Rover Sport SV, al igual que su antecesor (Range Rover Sport SVR), forman parte de un segmento muy especial, el de los SUV de altas prestaciones. Desde un punto de vista lógico, carecen de todo sentido: son coches muy pesados (cerca de dos toneladas y media en la mayoría de los casos), con grandes y potentes motores de gasolina, por lo que los consumos son muy altos. En algunos casos, estas versiones derivan de modelos reconocidos por sus aptitudes 4×4; el paradigma lo tenemos en el Mercedes-AMG G 63.
Lo curioso es que, pese a todo, la oferta es muy amplia. Si partimos de SUV de en torno a 5 metros de longitud con motor de gasolina con más de 550 CV, nos aparecen nombres como Audi RS Q8, Aston Martin DBX, Mercedes-AMG GLE 63 S, BMW X5/X6 Competition, Lamborghini Urus… Si ampliamos también a los híbridos enchufables, aparecen nombres como el Porsche Cayenne Turbo E-Hybrid o el BMW XM.
No obstante, pocos, por no decir ninguno, con capaces de fusionar estas características con unas notables aptitudes para moverse fuera del asfalto como lo hace el Range Rover Sport SV, más aún si se equipa la reductora opcional. Hablamos de un vehículo que se puede disfrutar tanto en las dunas de un desierto como en una pista de carreras, algo que no se puede decir de ninguno de sus rivales.

En el actual Range Rover Sport (generación L461, lanzada en 2022), la versión SV presume de un motor 4.4 V8 (de origen BMW) biturbo con 635 CV de potencia. Además, está disponible con dos acabados adicionales, denominados SV Black y SV Carbon. Esta última es la variante más cara de toda la gama: 229.450 euros. Todo sea dicho, el SV ‘normal’ ya supera los 205.000 euros… Por cierto, las siglas hace referencia al departamento de creaciones especiales del fabricante británico, Special Vehicle Operations.
El Range Rover Sport recibirá una actualización… ¿y un Range Rover SVR?
Como hemos comentado al principio, en la anterior generación L494), la versión más potente y deportiva llevaba el apellido SVR, que debutón en 2014. Equipaba el legendario bloque 5.0 V8 sobrealimentado por un compresor, que llegó a alcanzar los 575 CV de potencia. Estas imágenes nos hace sospechar que Range Rover esté preparando una versión aún más potente. Por lo visto en las imágenes del coche camuflado, los cambios estéticos serán bastante sutiles. De hecho, sólo se aprecia con claridad una importante modificación en la parte trasera, pues las cuatro salidas de escape (dos a cada lado) dejan lugar a un único terminal doble ubicada en el centro del paragolpes.

No sería descabellado pensar en que los ingenieros le vayan a dar un ‘empujón’ a este bloque para crear el Range Rover Sport SVR, aunque ello implicaría que superase su tope en lo que a potencia se refiere. Porque los 635 CV de este Range Rover Sport SV, que comparte con el Defender OCTA, son lo más a lo que se ha llevado a este bloque S68. También entregaba 635 CV el BMW M5 CS de la pasada generación, aunque con la anterior evolución de este bloque (S63).
De esta manera, el Range Rover Sport SVR también subiría un escalón en el ranking de SUV de gasolina (no híbridos enchufables) más potentes, que sigue estando encabezada por el Aston Martin DBX que, en su última versión (DBX S), se va hasta los 727 CV. Le sigue, bastante lejos, el Lamborghini Urus S y Performante, con 666 CV. El objetivo más cercano es el Audi RS Q8 performance, que alcanza los 640 CV.
A lo largo de 2026 tendremos noticias al respecto de este posible Range Rover Sport SVR, que también afectará al resto de la gama del Range Rover Sport.
Galería de imágenes espía del Range Rover Sport SVR
Fotos: SHProshots



























