La ITV se ha convertido en un servicio clave para mantener la seguridad vial en España y garantizar que millones de vehículos circulen en óptimas condiciones. Detrás de cada inspección, hay un equipo de profesionales que ha tenido que formarse a conciencia para llegar ahí. Carlos lo sabe bien. Su camino no fue inmediato, pero sí claro desde que decidió dedicarse al mundo del automóvil.
Con la reciente actualización de las titulaciones necesarias para ser inspector y director técnico de ITV, muchas personas están viendo nuevas oportunidades laborales en un sector estable, tecnológicamente avanzado y con amplia proyección. Carlos recuerda su propio proceso y lo comparte para quienes están valorando seguir ese mismo rumbo profesional.
3La formación complementaria obligatoria
Superar la parte académica es solo la primera etapa. Para trabajar en una ITV hay que completar una formación específica que garantiza que los inspectores entienden cada procedimiento, conocen la normativa y aplican los criterios de forma uniforme. Esa información complementaria se imparte en centros autorizados y es imprescindible para poder acceder al puesto.
«En mi caso, el curso incluyó prácticas en una estación de ITV, donde aprendí a manejar los equipos de diagnóstico, las líneas de inspección y los protocolos de seguridad». Fue el momento en que confirmó que el trabajo iba con él. Se trabaja con tecnología avanzada y exige atención constante, «algo que me hace sentir que cada jornada tiene sentido.








