Llegas a la gasolinera un sábado por la mañana y te encuentras el precio del combustible por las nubes. Recuerdas que el lunes anterior estaba varios céntimos más barato. ¿Es mala suerte? No, la OCU avisa de que hay días en los que repostar no es una buena idea, sobre todo para tu bolsillo.
Es probable que, sin saberlo, estés eligiendo de forma sistemática el peor momento de la semana para llenar el depósito. La OCU lleva años analizando este fenómeno, y sus conclusiones son demoledoras. Existe un patrón claro, y conocerlo puede ahorrarte mucho dinero al cabo del año.
El baile de precios: ¿Por qué la gasolina no cuesta siempre lo mismo?

Para entender por qué unos días son peores que otros, primero hay que saber por qué el precio del combustible varía a lo largo de la semana. Cuando miras el cartel de la estación de servicio, el precio que ves es el resultado de una suma compleja.
Por un lado, está el coste de la materia prima, el petróleo Brent, que sube y baja según la geopolítica mundial, los costes de refino y transporte, y, por supuesto, los impuestos. En España, los impuestos (el IVA y el Impuesto Especial de Hidrocarburos) suponen casi la mitad de lo que se paga en cada litro.
Pero hay un último factor, el que lo cambia todo a corto plazo: el margen comercial de la propia estación de servicio, que se ajusta según la competencia y, sobre todo, según la demanda. Aquí es donde entra en juego el estudio de la OCU.
La OCU lo tiene claro: El fin de semana es el peor momento para repostar

El análisis anual de la OCU es uno de los más exhaustivos de España. Rastrean los precios de más de 12.000 gasolineras repartidas por todo el territorio nacional, día tras día. Y el patrón que han detectado es que los peores días para repostar son los fines de semana.
El sábado y el domingo son los días en que los precios alcanzan su pico. Las estaciones de servicio saben que es cuando la mayoría de los conductores particulares cogen el coche, ya sea para el ocio del fin de semana o para dejar el coche listo para la semana siguiente. Hay más demanda, y ante esa necesidad, los precios se ajustan al alza.
El fenómeno del fin de semana se agrava en momentos específicos. La OCU advierte que los peores momentos del año coinciden, como es lógico, con las grandes operaciones de tráfico. Los días previos a un puente largo o al inicio de las vacaciones de verano o Semana Santa son una auténtica trampa para el consumidor.
Las gasolineras anticipan la Operación Salida y saben que millones de conductores van a necesitar el depósito lleno sí o sí, independientemente del precio. Es pura lógica de mercado: si la demanda es altísima y la necesidad es ineludible, los precios suben. Repostar el día antes de irte de vacaciones es la peor decisión financiera que puedes tomar esa semana.
El día “secreto” para ahorrar en combustible

Si el fin de semana es el villano de esta historia, el lunes es el héroe. Según los datos de la OCU, el lunes suele ser el día más barato de la semana para llenar el depósito.
La explicación es la contraria a la del fin de semana. La gran demanda ya ha sido cubierta porque muchos han repostado el viernes o el sábado. El lunes, la afluencia a las gasolineras cae en picado. Para atraer a los pocos conductores que necesitan repostar ese día, las estaciones ajustan sus márgenes a la baja, aumentando la competencia entre ellas. Este «efecto lunes» es una de las pocas verdades constantes en el volátil mundo de los carburantes.
El día y la hora son importantes, pero el dónde también es crucial. El estudio de la OCU identifica las cadenas que, de media, ofrecen los precios más competitivos. En sus últimos informes, suelen destacar las gasolineras low cost.
Estas estaciones de servicio pueden ofrecer precios más bajos porque ajustan sus costes. Suelen ser automáticas, sin personal o con personal mínimo, estar ubicadas fuera de las grandes vías de paso y tienen una estructura más sencilla.
La conclusión de los análisis de la OCU es clara: el conductor que no planifica, pierde dinero. Repostar es una necesidad, pero cuándo y dónde lo haces puede marcar una gran diferencia en tu presupuesto mensual.
La estrategia es sencilla. Primero, no te dejes llevar por la reserva. Intenta controlar tu nivel de combustible para poder elegir el día de repostaje. Segundo, haz del lunes por la mañana tu momento oficial para visitar la gasolinera. Si no puedes el lunes, evita a toda costa el viernes por la tarde, el sábado y el domingo.
No dejes que las fluctuaciones del precio jueguen en tu contra. Con la información de la OCU, ahora tienes el poder de decidir cuándo quieres pagar menos.


                                    





