El cambio está a la vuelta de la esquina y el mercado está inundado de luces V-16 a la venta por precios muy diversos. La confusión es total, y ante este caos, la OCU ha puesto la lupa sobre este nuevo dispositivo de seguridad obligatorio. Y su principal conclusión es una advertencia: cuidado con el precio es el chivato.
Lo que pagues por tu nueva V-16 es el indicador más fiable para saber si estás haciendo una compra inteligente o tirando el dinero a la basura. Y lo que es más importante, lo más caro no siempre es mejor.
3Tampoco tienes por qué pagar 80 o 90 euros
Una vez descartadas las demasiado baratas, ¿qué pasa con el otro extremo? ¿Qué hay de esas balizas V-16 que ves en el mercado por 80, 90 euros o incluso más?
La OCU también aconseja tener cautela. Que un dispositivo sea mucho más caro no significa que su función esencial sea mejor que la de un modelo de 50 euros.
La organización señala que estos precios más altos a menudo se deben a características adicionales o a estrategias de marketing. Puede que vengan en un pack especial con otros accesorios de seguridad, como un botiquín o un chaleco. Puede que la marca sea considerada premium o que el diseño del dispositivo sea más estilizado.
Sin embargo, la OCU recuerda que estas características extra no ofrecen una funcionalidad superior a la esencial exigida por la DGT. Una baliza de 80 euros enviará la misma señal a la DGT 3.0 que una de 50. Ambas te geolocalizarán igual y ambas cumplirán la ley.
Por lo tanto, si encuentras un modelo que te gusta y cuesta más, eres libre de comprarlo, pero debes ser consciente de que ese sobrecoste no se traduce en una mayor seguridad o un mejor cumplimiento de la normativa. Estás pagando por extras, no por necesidad.
En definitiva, la advertencia de la OCU es una ayuda en un mercado confuso. No te dejes engañar por chollos que te saldrán caros y no pagues de más por extras que no necesitas.
