El precio de la gasolina es una de las principales preocupaciones de muchos conductores. Algunos repostan en gasolineras low cost para cuidar su bolsillo, pero otros no se fían de la calidad de esos combustibles. Para acabar de una vez con las dudas, la OCU ha realizado un estudio profundo tanto de las marcas más económicas como de las gasolinas premium.
¿Cuáles son los resultados? ¿Es verdad que las gasolinas low cost son peores? ¿Puedes causar averías en los vehículos si se reposta este combustible?
4Entonces, ¿por qué son tan baratas las gasolineras low cost?
La pregunta que surge es evidente: Si el producto es bueno, ¿cómo pueden venderlo tan barato? La respuesta no está en la calidad de la gasolina, sino en el modelo de negocio.
A diferencia de las gasolineras premium, que suelen tener una plantilla atendiendo a los clientes y una serie de servicios adicionales, las gasolineras low cost, especialmente las automáticas o las vinculadas a supermercados, recortan todo lo posible. Muchas no tienen personal o tienen el mínimo indispensable, se ubican en terrenos más económicos o funcionan como un gancho para que entres a comprar al supermercado.
Al eliminar los costes operativos y reducir su margen de beneficio buscando vender mucho volumen, pueden ofrecer un precio inferior. No es que te den peor gasolina, es que te están cobrando menos por el servicio que rodea al acto de repostar.
La conclusión es clara: no tienes porqué sentirte culpable ni tener miedo cada vez que paras en una gasolinera low cost. La OCU avala que el combustible que venden cumple con la legalidad y es seguro para tu motor. Esos céntimos de diferencia por litro, que pueden suponer más de diez o quince euros por depósito lleno, son un ahorro real que no se va a traducir en una avería el mes que viene.
