Contratar un seguro de coche es uno de esos trámites que muchos conductores hacen casi en automático: comparan precios, revisan por encima las coberturas y, si su coche vale la pena, eligen un “Todo Riesgo” pensando que así están protegidos pase lo que pase. Pero, como advierte Esther, mediadora de seguros con más de una década de experiencia, esta decisión no debería tomarse a la ligera.
Porque la realidad es que no todos los seguros “Todo Riesgo” son iguales. Hay diferencias importantes entre compañías, exclusiones que sorprenden al asegurado cuando más necesita cobertura y condiciones que pueden hacer que aquello que creías incluido… no lo esté. Y esos detalles, casi siempre, están en la famosa “letra pequeña” que la mayoría evita leer.
4Los talleres concertados: ventajas… y peligros si no los eliges bien
La mayoría de aseguradoras incentivan acudir a sus talleres concertados, donde tienen acuerdos especiales y controlan procesos y costes. Eso puede ser beneficioso: rapidez, coche de sustitución, trámites simplificados y piezas garantizadas. Pero también hay un aspecto que muchos clientes desconocen: si decides reparar en un taller no concertado, puede haber limitaciones económicas, demoras o incluso diferencias en la calidad de los materiales utilizados.
Esther recalca que no está en contra de los talleres concertados, pero recomienda evitar firmar pólizas que “castigan” al asegurado por elegir taller. “Hay pólizas que reducen las coberturas o imponen condiciones adicionales si decides repararlo en otro sitio. Eso hay que leerlo siempre”, aconseja. Su recomendación es buscar un seguro que dé libertad real de elección sin penalizaciones ocultas.







