En la industria del automóvil, hay innovaciones que se ven y otras que se sienten. Y luego están aquellas que, aunque permanecen ocultas bajo el salpicadero, redefinen la manera en que se concibe un vehículo. El nuevo travesaño del panel de instrumentos que JLR ha desarrollado para su futura generación de modelos pertenece precisamente a esta última categoría: es invisible para el conductor, pero crucial para su seguridad y para el impacto medioambiental del automóvil.

Concebido en las instalaciones de Gaydon (pronto incorporarán este novedoso sistema de mantenimiento), el rediseño aborda uno de los elementos estructurales más determinantes del interior. Este travesaño, que se extiende de lado a lado del vehículo por detrás del salpicadero, actúa como columna vertebral del habitáculo. Absorbe impactos, soporta los airbags y reduce el ruido y las vibraciones para ofrecer esa sensación de calma y solidez que distingue a los modelos de lujo de la marca. Y hasta ahora, su fabricación en magnesio o acero imponía un coste ambiental considerable.
Más ligero, más resistente
La nueva solución, sin embargo, plantea un cambio radical. JLR ha desarrollado un diseño híbrido que combina acero con plástico reforzado con fibra, un material que ofrece ligereza, resistencia y una capacidad notable de absorción de energía. La sustitución del magnesio —cuya producción supone una elevada huella de carbono— es el núcleo de esta transformación.
Gracias a ello, la compañía calcula una reducción de más de 50.000 toneladas de CO₂ al año, equivalente al consumo energético medio de unos 17.000 hogares del Reino Unido. Un avance silencioso, pero de enorme trascendencia.

Thomas Mueller, Executive Director de Product Engineering de JLR, resume el espíritu del proyecto: «Esta innovación pone de manifiesto la creatividad y el ingenio de nuestros equipos de ingeniería y sostenibilidad, así como de nuestros proveedores. Hemos reinventado un elemento oculto para establecer un nuevo estándar de arquitectura sostenible en nuestros próximos automóviles de lujo, sin sacrificar la seguridad ni la calidad», señala. En ese equilibrio —entre sofisticación, responsabilidad ambiental y rigor técnico— se sitúa el verdadero valor del avance.
No es un simple cambio de materiales
El proceso para llegar hasta aquí no ha sido sencillo. Matthew Atkinson, Lead Research Engineer de JLR, recuerda que la reinvención del travesaño no consistió únicamente en cambiar materiales: «Supuso superar un reto técnico de gran envergadura. Trabajamos mano a mano con nuestros proveedores para garantizar que el nuevo material híbrido cumpliera los más altos criterios de seguridad, refinamiento y durabilidad, además de reducir significativamente las emisiones de CO₂». La clave fue una colaboración profunda con Celanese, CCP Gransden y Petford Group, tres actores fundamentales en el desarrollo del compuesto final.

Los ensayos a los que fue sometida la nueva estructura confirmaron que esta combinación híbrida funciona incluso mejor de lo esperado. El plástico reforzado con fibra no solo reduce el peso, sino que ofrece una notable capacidad de absorción de energía ante un impacto, mientras que el acero aporta rigidez y solidez estructural. Juntos, ambos materiales aseguran que el travesaño siga actuando como el eje protector del habitáculo sin perder eficacia.
Estrategia Reimagine de JLR
Más allá del componente técnico, este desarrollo refleja la estrategia Reimagine, con la que el grupo británico aspira a orientar su futuro hacia un lujo moderno y sostenible. En este contexto, la innovación del travesaño no es un elemento aislado, sino una pieza coherente dentro de un plan más amplio que busca redefinir lo que significa ser un fabricante de automóviles de alta gama en el siglo XXI.

Porque, aunque el conductor jamás vea este travesaño, sí percibirá sus beneficios: un coche más sostenible, igual de seguro y con la refinada experiencia de conducción que caracteriza a JLR. A veces, las revoluciones nacen en los detalles que pasan desapercibidos. Y este, escondido pero esencial, promete marcar el camino de una nueva arquitectura del lujo responsable.








