La Guardia Civil ha puesto un total de 3.283 multas en solo siete días por cometer la misma infracción. Hasta los agentes de tráfico se sorprenden con las cifras de la última campaña especial de vigilancia que la Dirección General de Tráfico (DGT) llevó a cabo durante una semana el pasado mes de octubre, aunque el motivo no nos resulte tan escandaloso (y debería hacerlo).
Entre el 6 y el 12 de octubre, la DGT puso en marcha una campaña especial de vigilancia en la que controlaron a más de 404.000 vehículos en todo el país, con la colaboración de los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil y la Policía Local de muchos ayuntamientos. El resultado son 7.983 conductores sancionados por distintos comportamientos, pero lo más llamativo es que un 40% recibieron una multa por el mismo motivo. Ni alcohol ni excesos de velocidad, ¿imaginas la razón?
2Ojo con la combinación de alcohol, drogas y distracciones
El uso del móvil al volante está en el ‘top’ de las principales distracciones, y también es la causa de uno de cada tres siniestros mortales, según datos de la DGT. Pero hay otras combinaciones también peligrosas y que la Guardia Civil ha detectado durante esta campaña especial.
De todas las multas, Tráfico confirma que ‘pillaron’ a 825 conductores que además de haber cometido una de las infracciones anteriores, también conducían con una tasa de alcohol superior a la permitida. Y 786 dieron positivo en drogas.
«Con esta campaña de intensificación de la vigilancia, la DGT refuerza su mensaje de concienciación sobre la necesidad de mantener la atención plena al volante y recuerda que cualquier distracción, por mínima que parezca, puede tener consecuencias graves en la seguridad vial», recuerda la DGT en la nota de prensa que han compartido para hacer públicos estos datos.
La finalidad de esta campaña de Tráfico era concienciar a los conductores del riesgo que suponen las distracciones, pues muchas veces no le damos la importancia que merecen. Y es que apartar la vista de la carretera, aunque solo sea unos segundos, ya sea para mirar el móvil o buscar algo en la guantera, puede tener consecuencias fatales.
