¿Has abierto Google Maps y notado algo diferente, aunque no sepas exactamente el qué? Es justo la sensación que muchos usuarios están experimentando estos días. La aplicación de navegación más utilizada del mundo acaba de recibir un cambio visual que marca el inicio de una nueva era. Google ha rediseñado los dos botones que más usamos sin pensarlo: el de ubicación y el de capas.
Y no, no es una simple actualización estética. Es una transformación profunda que afecta a la forma en que interactuamos con el mapa, con un enfoque más limpio, intuitivo y alineado con el lenguaje visual de la compañía. Adiós al diseño clásico que nos ha acompañado durante años. Google Maps se viste de modernidad para ofrecernos una experiencia más emocional, fluida y coherente con el resto de sus servicios.
1Google Maps apuesta por un nuevo lenguaje visual
El primer gran protagonista de este cambio es el botón de ubicación, ese pequeño icono asociado a la flecha de brújula y que nos devuelve al punto exacto donde estamos. Hasta ahora, su diseño casi inalterable se había convertido en una de sus señas de identidad. Pero Google ha decidido despedirse de este símbolo clásico para abrazar una estética más moderna y minimalista.
En la nueva versión, el botón abandona su forma circular para pasar a ser un cuadrado con esquinas redondeadas, siguiendo las pautas de diseño de Material 3 Expressive, un modelo que apuesta por interfaces más ‘emocionales’, claras y cercanas. El nuevo icono de ubicación es ahora más pequeño, con un punto azul en el centro y un fondo más claro, lo que le da un aspecto más limpio y actual.
