El avance de la inteligencia artificial está transformando la manera en la que conducimos, aprendemos y entendemos la seguridad vial. Lo que hasta hace pocos años nos parecía tecnología futurista —coches que frenan solos, asistentes que leen las señales o sistemas que detectan la fatiga—, hoy forma parte del equipamiento habitual de muchos vehículos. Pero la innovación no se detiene y ahora llega otro salto: las gafas inteligentes diseñadas para mejorar la conducción.
Con más de quince años de experiencia dando clases, Sergio ha sido uno de los primeros en probar un prototipo de gafas con inteligencia artificial aplicadas al mundo del motor. Y su veredicto es claro: «Ayudan de verdad. No sustituyen al conductor, pero son como un compañero experto que te avisa cuando lo necesitas». ¿Hacia dónde se dirige la formación vial? ¿!– /wp:paragraph –>
4Su aplicación en la seguridad vial profesional
Aunque pensadas inicialmente para alumnos de autoescuela, el potencial de estas gafas inteligentes va mucho más allá. Los conductores profesionales —como repartidores, taxistas, transportistas…— podrían beneficiarse enormemente de esta tecnología. La inteligencia artificial permite detectar fatiga, estrés o tiempos prolongados sin descanso, información clave en profesiones en las que la atención continua es fundamental.
«Imagínate un camionero que lleva muchas horas al volante. Si las gafas con inteligencia artificial detectan microgestos de cansancio, pueden avisar antes de que ocurra una situación peligrosa», explica Sergio. Este tipo de aplicaciones no solo mejoraría la seguridad individual, sino también la de todos los usuarios de la carretera.







