Si crees que eres más listo que la Dirección General de Tráfico (DGT), espera a descubrir los nuevos radares que han incorporado ya a las carreteras españolas. Hasta ahora, los fijos y los de tramo están señalizados por ley, y solo tenías que tener cuidado con los móviles y el helicóptero Pegasus, aunque también hay aplicaciones que te notifican (con más o menos acierto).
Pero la última novedad de la DGT se llama ‘radar remolque’ y pone 20 multas por minuto, es decir, una cada tres segundos. Es muy difícil de ver en las carreteras, a pesar de su tamaño, y se puede mover de un lugar a otro, así que tampoco va a servir que otro conductor avise de dónde está ubicado.
Lleva ya varios meses formando parte del ‘arsenal’ de la DGT y llega para romper con todos los esquemas de los conductores a los que les gusta superar los límites de velocidad. En un primer momento, lo vimos en las autovías de Catalunya y ahora ha dado el salto a uno de los tramos más transitados de una autovía madrileña.
1Así es el nuevo radar remolque de la DGT
El nombre de ‘radar remolque’ no es casualidad, sino que se debe a la literalidad de su nombre. Estos cinemómetros se enganchan literalmente a la bola de remolque de un coche o furgoneta, así que se pueden mover de un punto a otro de la red viaria española. Quizá alguien te avisa de que está instalado en un punto kilométrico, pasas por ahí controlando la velocidad y te está esperando unos kilómetros más adelante.
A la DGT le gusta porque es un dispositivo que se puede mover de manera ‘sencilla’, reubicarlo en tramos conflictivos, carreteras secundarias o zonas de concentración de accidentes. Además, no necesitan instalación fija ni conexión eléctrica, porque funcionan con una batería que aguanta hasta dos semanas y con conexión a internet para enviar sanciones en tiempo real a los centros de tráfico.
Como no tienen la apariencia de un radar fijo ni tampoco es un vehículo ‘sospechoso’ de tener un radar móvil, pasa más desapercibido entre los conductores que no conocen los radares remolques. Por tanto, aunque su tamaño es importante, si no sabes que la DGT los utiliza, seguramente no imagines que sea un nuevo elemento para controlar la velocidad.








