Mientras la industria automovilística se debate entre algoritmos de conducción autónoma y pantallas táctiles omnipresentes, Mitsubishi Motors elige un camino diferente para el Japan Mobility Show 2025: recordar que la aventura nunca pasa de moda. Bajo el lema «Forever Adventure» –Aventura para siempre-, el fabricante nipón presentará en Tokio una visión del futuro de la movilidad que no renuncia a lo esencial: la emoción que convierte un trayecto en una experiencia, un vehículo en un compañero de viaje.
La propuesta de Mitsubishi para el certamen, que abrirá sus puertas al público del 31 de octubre al 9 de noviembre en la capital japonesa, incluye un concept car equipado con tecnologías futuras aún por revelar. Pero el verdadero mensaje no está en las especificaciones técnicas, sino en la filosofía que sirve de base para su desarrollo.

«Las tecnologías de asistencia al conductor evolucionan mediante la innovación», reconoce la compañía, «pero seguimos comprometidos con la alegría pura de conducir y visualizamos una experiencia de movilidad que despierta un sentido de aventura». Es una declaración de principios en una época donde muchos fabricantes parecen ansiosos por eliminar al conductor de la ecuación. La marca japonesa, en cambio, quiere mantenerlo al volante, pero dotándolo de herramientas que amplifiquen sus capacidades sin anular su protagonismo.
La gama de Mitsubishi, marcada por la aventura
Para materializar esta visión, Mitsubishi, además de este innovador concepto, exhibirá su gama actual como prueba de que aventura y practicidad no son conceptos incompatibles y que la marca de los tres diamantes ha tenido siempre en cuenta al conductor como el principal protagonista al que van dirigidos sus productos.

El catálogo de modelos de Mitsubishi que se van a presentar en Tokio incluyen el Delica D:5, ese monovolumen todoterreno que combina el confort de un habitáculo espacioso con capacidades off-road que sacaría los colores a más de un SUV convencional. Un vehículo que reconoce que la aventura familiar no tiene por qué significar renunciar al barro.
El Delica Mini, un kei-car -la categoría única japonesa de microcoches- que desafía sus dimensiones compactas con robustez, diseño encantador y altura generosa. Además estarán el Triton, pickup que equilibra la durabilidad necesaria para el trabajo duro con el confort y estabilidad de dirección propios de un SUV premium.
Y el Outlander PHEV, el crossover SUV electrificado que desde 2013 —cuando se convirtió en el primer SUV híbrido enchufable del mundo— ha demostrado que el rendimiento ambiental excepcional y el dinamismo de conducción pueden coexistir.
Con cerca de 28.000 empleados globalmente e instalaciones de producción en Japón, Mitsubishi mantiene una posición competitiva singular: especialización en SUVs, pickups y vehículos híbridos enchufables dirigidos a «conductores ambiciosos dispuestos a desafiar convenciones y abrazar la innovación». El Japan Mobility Show 2025 será la plataforma perfecta para seguir mostrando esta filosofía.