La movilidad urbana está en plena revolución. En apenas unos años, los patinetes eléctricos se han convertido en uno de los medios de transporte más populares en las ciudades españolas. Rápidos, económicos y respetuosos con el medio ambiente, se han ganado el favor de miles de usuarios para desplazarse. Pero su popularidad también ha traído consigo un nuevo reto: garantizar la seguridad.
En ese contexto, Valladolid se ha convertido en la primera ciudad de España en poner en marcha una medida inédita: la Policía Municipal podrá someter a una especie de ITV sorpresa a los patinetes eléctricos, a fin de controlar el estado técnico de estos vehículos y garantizar que circulen en óptimas condiciones. La noticia marca un antes y un después en la regulación de los llamados Vehículos de Movilidad Personal (VMP), y podría servir de ejemplo para otras ciudades del país.
1Un convenio pionero que marca tendencia en España

El Ayuntamiento de Valladolid y el Grupo Itevelesa —empresa asociada a AECA-ITV— han firmado un convenio sin precedentes en nuestro país. Este acuerdo tiene como objetivo principal mejorar la seguridad vial y proteger el entorno urbano mediante inspecciones técnicas a los patinetes eléctricos que circulen por la ciudad.
El pacto permitirá que la Policía Municipal pueda realizar controles aleatorios a los VMP en circulación, contando con el apoyo técnico de las estaciones de ITV locales. Así, si un agente detecta un patinete en mal estado, podrá solicitar una revisión inmediata y emitir un informe técnico con respaldo profesional.