Los ciclistas acostumbrados a rodar por carretera están a punto de sufrir un cambio importante en su día a día. El Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado una nueva normativa que afecta directamente a cómo y por dónde podrán circular las bicicletas en determinados tramos de la Red Estatal. Y no todos lo ven con buenos ojos.
El Gobierno ha dado luz verde a que los arcenes de algunas carreteras puedan sustituirse por carriles bici segregados. Una medida que, aunque busca fomentar la seguridad y el transporte limpio, también genera preocupación entre los aficionados y profesionales de los pedales: ¿adiós a la libertad de circular por carretera? La bici está a punto de vivir una nueva etapa… y no todos los ciclistas están preparados para ella.
1El cambio legal que afectará a los ciclistas
La modificación del Reglamento General de Carreteras se enmarca dentro de la nueva Ley de Movilidad Sostenible. En ella se establece que, en ciertos tramos de carretera, los arcenes se podrán reducir o eliminar para construir vías ciclistas paralelas. Una medida que, según el Gobierno, aumentará la seguridad y fomentará el uso de la bicicleta como medio de transporte limpio.
En la práctica, esto significa que algunas carreteras nacionales o convencionales cambiarán su diseño. Donde antes había un arcén, podría haber ahora un carril bici independiente. Según el Ministerio de Transportes, se pretende ofrecer a los ciclistas un entorno más seguro y reducir los accidentes, especialmente en zonas donde el tráfico motorizado y las bicicletas comparten espacio.








