Después de que Volkswagen rindiera homenaje al mítico Polo con un espectacular vídeo al estilo Gymkhana, donde sus modelos WRC y RX1e Rallycross deslizaban entre nubes de humo por una de sus fábricas, la firma de Múnich no ha querido quedarse atrás. De ahí que la firma bávara haya ido un paso más allá entregando las llaves de un BMW M2 de 1100 caballos al piloto profesional Elias Hountondji, uno de los célebres Driftbrothers patrocinados por Red Bull, para transformar la planta de Múnich en su propio patio de recreo a base de derrapes, potencia bruta y neumáticos al rojo vivo.
Acostumbrado a controlar coches salvajes al límite, Hountondji lleva años perfeccionando el arte del drift de precisión. Su técnica combina acelerador, dirección y equilibrio con una sincronía casi quirúrgica, logrando mantener el coche cruzado a velocidades de vértigo sin perder el control. Pero incluso para él, enfrentarse a una pista tan peculiar como la propia fábrica de BMW suponía un desafío de alto riesgo. Un leve error de cálculo podía significar impactar contra maquinaria de millones de euros o dañar alguna de las joyas que allí se producen.
Este BMW M2 se ha llevado a extremo en todos los sentidos
El resultado, sin embargo, es puro espectáculo. El vídeo muestra al piloto deslizando su BMW M2 preparado para drift entre líneas de montaje y zonas de producción, a escasos metros de piezas y herramientas. Aunque las velocidades son relativamente moderadas —una medida lógica para minimizar riesgos—, las imágenes transmiten toda la adrenalina del drifting en un escenario tan insólito como simbólico: el corazón donde nacen los modelos más deportivos de BMW. Las cámaras captan el rugido del motor, las ruedas traseras lanzando humo y las marcas negras que van dibujando una auténtica firma de caucho sobre el suelo de la fábrica. Quizás el sonido del coche queda algo eclipsado por la música de fondo, pero el conjunto sigue siendo un vídeo que cualquier amante del motor debería ver.
Este proyecto también sirve como adelanto de lo que los Driftbrothers están preparando para el Campeonato Europeo de Drift Masters de la próxima temporada. Su nueva máquina parte del BMW M2 de calle, cuyo tope de gama, el extraordinario CS, ya entrega 530 CV de potencia. Pero en el taller de los hermanos Hountondji esa cifra se queda corta: el BMW M2 de drift duplica la potencia, alcanzando 1.100 CV y un descomunal par motor de 1.250 Nm. Mantiene la tracción trasera y el mítico bloque S58 de seis cilindros en línea biturbo y 3.0 litros, aunque profundamente revisado. Incluye turbocompresores sobredimensionados, un bloque reforzado y un sistema de refrigeración mejorado, además de una salida de escape muy particular… situada donde normalmente estaría la luneta trasera.


                                    






