Conducir por una autopista de peaje en España será más caro a partir del 1 de enero de 2026. Así que si te vas de vacaciones estos últimos días del año y vuelves a casa en enero, el viaje de vuelta te va a salir más caro que el de ida por este subidón en el precio de los peajes.
El motivo está en la inflación, aunque no en la actual. Durante todo este año hemos notado el repunte de los precios en la cesta de la compra y en otros servicios básicos, pero también ha dejado cuentas pendientes en las concesiones de las autopistas que ahora nos toca asumir.
Ya lo hicieron en 2024 y este mismo 2025, pero todo apunta a que el próximo ajuste va a volver a estar por encima de lo que marca el IPC. El motivo, por un lado, sí que está en ese Índice de Precios de Consumo y, por el otro, en cómo se decidió amortiguar las subidas cuando se disparó la inflación. Esa contención no desapareció de la nada, sino que se aplazó y ahora toca asumirla.
1¿Por qué el precio de los peajes va a subir en 2026?
Para situarnos, todo comienza con la ‘fórmula’ que se aplica cada comienzo de año. Tiene que ver con la evolución media del IPC en los 12 meses anteriores, corregida según el tráfico real de cada autopista frente al que estaba previsto. Con estos datos, el resultado para 2026 es una subida media del 2,61%, según fuentes del mercado.
Eso sí, este porcentaje no será el definitivo, porque a esto hay que sumarle una compensación pendiente. En 2023, cuando se disparó la inflación, el Gobierno decidió limitar la subida de los peajes el 4%. Según esta fórmula, el incremento debería haber sido mucho mayor, entre el 8,4% y el 9,5%.
¿Y qué ocurre con esa diferencia entre lo que fue y lo que debería haber sido? Hubo una promesa de compensar a las concesionarias entre 2023 y 2026 con cargo a los Presupuestos Generales del Estado. Eso sí, este sistema tiene fecha de caducidad y la subvención desaparece a finales de 2026. Así que la parte pendiente va a repercutir al usuario, aunque de forma escalonada.
No es la primera vez que ocurre, pues en 2024 subieron las tarifas de las autopistas de peaje entre un 5% y un 6,65%, cuando la fórmula del IPC marcaba un 4,03%. En 2025, el alza fue de entre el 3,84% y el 5,45%, frente a un 2,86% teórico, siempre según datos del Ministerio de Transportes.
Con ese precedente, ya podemos intuir que en 2026 no habrá una subida del 2,61%, sino que la subida final va a ser superior para cerrar el ‘ciclo’ que comenzó hace ya tres años.








