La compañía con sede en California, Scarbo Vintage, reconocida por el diseño del automóvil de carreras Hoonipigasus Pikes Peak de Ken Block, regresa con una nueva propuesta casi inclasificable: el SV Rover, que ellos consideran un todoterreno de carreras para circular por las carreteras. Es decir un ‘monster truck’. Un vehículo con la apariencia del clásico Land Rover Defender que hizo su debut público en la F.A.T. International Ice Race en Aspen, Colorado.
A primera vista, el SV Rover evoca la nostalgia de los clásicos Land Rover Defender, pero bajo su apariencia icónica se esconde una ingeniería completamente innovadora. Su carrocería está fabricada con aluminio y fibra de carbono, y las opciones de sistema de propulsión son totalmente incomparables con cualquier Land Rover antiguo.
Dos alternativas de propulsión, cada una con más de 1.000 caballos, para el SV Rover
Porque en este caso, dos son las alternativas para elegir. Los clientes pueden optar por un motor V8 sobrealimentado que produce 1.100 caballos de potencia y está gestionado por una transmisión automática de 8 velocidades. La otra opción es más acorde a la moda de estos tiempos y se trata de un grupo propulsor eléctrico de 1.005 caballos de potencia que cuenta con un paquete de baterías de 75 kWh. Ya sea con motor de gasolina o eléctrico, la potencia se distribuye a las cuatro ruedas a través de una caja de transferencia con reductora, y además cuenta con diferenciales de bloqueo delanteros y traseros.
Los sistemas de suspensión neumática de aire con amortiguadores montados en el interior del SV Rover permiten un recorrido de la rueda de hasta 76 centímetros, según Scarbo Vintage, junto con ajustes de altura y de válvulas. El SV Rover cuenta con neumáticos en llantas de 20 pulgadas, dirección a las cuatro ruedas y un sistema de frenos compuesto por pinzas Brembo de 6 pistones y discos de carbono cerámico de 15,7 pulgadas.
En el interior, la cabina forrada de Alcantara cuenta con un grupo de instrumentos digital de 12,3 pulgadas, una pantalla principal de 12,8 pulgadas y elementos de confort básicos que incluyen climatizador automático, cierre centralizado de puertas y ventanas eléctricas. Este vehículo biplaza también tiene un área de carga trasera detrás del compartimiento del motor.
El precio «estándar» de un SV Rover es de 1,5 millones de dólares (alrededor de 1,4 millones de euros), pero Scarbo Vintage señala que todos los vehículos se construyen bajo pedido, por lo que el precio de construcciones específicas variará dependiendo de cómo los clientes configuren sus vehículos.










































