La subida a Pikes Peak –un pico en la cordillera Front, en el centro del estado de Colorado, EE. UU.– es una de las carreras de montaña más famosas del mundo. Conocida también como La carrera hacia las nubes, durante décadas ha permitido mostrar músculo a los fabricantes norteamericanos al tiempo que los constructores europeos han aprovechado para demostrar su poderío tecnológico.
Con una historia que data de 1916, en la subida a Pikes Peak han participado pilotos de renombre y vehículos de increíbles prestaciones gracias a la existencia de una categoría Unlimited en la que las únicas limitaciones atañen a cuestiones de seguridad.
Esto nos permitió disfrutar a finales de los años 80 de auténticas bestias mecánicas evolucionados a partir de los extintos Grupo B como el Audi Sport Quattro que llevaron a la victoria Michele Mouton (dos veces), Bobby Unser y Walter Röhrl o el Peugeot 405 T16 de Ari Vatanen.
La fiesta de la potencia continuó en los 90 con prototipos como las diferentes evoluciones del vehículo de Suzuki vestido con diferentes carrocerías con el que Nubohiro “Monster” Tajima logró hasta nueve victorias.
Pikes Peak vive la era de los vehículos eléctricos
Pero durante los últimos años los vehículos eléctricos se han hecho los protagonistas de la Pikes Peak International Hill Climb, especialmente desde que en 2018 Volkswagen destrozara todos los cronómetros con el I.D. R Pikes Peak, completando los escasos 20 kilómetros de recorrido en un tiempo de 7:57.148, con Romain Dumas a sus mandos.
Siguiendo la línea de los vehículos eléctricos, ahora es Ford quien ha confirmado que participará en la carrera de montaña de Pikes Peak, y para ello Ford Performance ha desarrollado un prototipo del que, por ahora, tan sólo tenemos unos teasers: el Ford F-150 Lightning SuperTruck.
Con este vehículo, la marca del óvalo pretende “ayudar a avanzar en la investigación y el desarrollo de sistemas de propulsión eléctricos de la compañía”. Para ello, el punto de partida es el pick up eléctrico de producción en serie de la firma norteamericana, con mejoras en aerodinámica y en cuanto a potencia.
Y, por el momento, no sabemos mucho más del vehículo. Sí podemos recordar que el modelo de serie desarrolla un máximo de 588 CV y que puede disponer de baterías de hasta 131 kWh de capacidad, todo ello con una carrocería de casi seis metros de longitud y 3,70 metros de distancia entre ejes.
No obstante, los teasers mostrados por Ford nos dan a entender que queda muy poco del F-150 Lightning original y que, en su defecto, parece ser que vamos a encontrar más bien un monoplaza de competición carrozado con una silueta de pick up.
Lo que sí ha sido confirmado por Ford es que el vehículo será pilotado por el francés Romain Dumas, que como ya hemos visto tiene amplia experiencia en esta prueba y ostenta el mejor registro logrado hasta la fecha. No obstante, dado el planteamiento de su F-150 Lightning, no parece que Ford pretenda batir ningún récord con su vehículo.
Los objetivos de Ford en Pikes Peak
Con todo ello, la participación de Ford será una ocasión de darse un baño de masas en una carrera que es todo un orgullo patrio para los estadounidenses. Celebrada tradicionalmente durante el Día de la Independencia de los Estados Unidos, en esta ocasión las clasificaciones se disputarán del 18 al 20 de junio, mientras que la carrera se llevará a cabo el 23 de junio.
Más allá de eso, Ford asegura que el desarrollo de prototipos de competición eléctricos les permite “superar los límites de los sistemas de propulsión […] en las condiciones más extremas y recuperar esos aprendizajes para mejorar los vehículos de producción. Estos laboratorios rodantes orientados al rendimiento facilitan el desarrollo de componentes como motores, inversores y paquetes de baterías, además de informar sobre la calibración del software y la química de las celdas de la batería, entre otras áreas”.
En cualquier caso, si bien Ford no es una de las marcas tradicionalmente ligadas a Pikes Peak, la experiencia de este año no es nueva, ya que en 2023 compitió con la SuperVan eléctrica 4.2 de más de 1.400 CV basada en la E-Transit Custom, estableciendo un récord de su categoría.
Ford Performance tiene actualmente dos programas deportivos más con vehículos eléctricos: el Mustang Super Cobra Jet 1800 y el Mustang Mach-E 1400, vehículos que “están ayudando al equipo a aprender sobre áreas como la química de las celdas de las baterías, la generación de calor y la refrigeración”. Paralelamente, Ford también está ampliando su conocimiento técnico de sistemas de propulsión híbridos con el desarrollo de su propio motor de Fórmula 1 para 2026 en asociación con Red Bull Racing, pero esa es otra historia de la que hablaremos largo y tendido a su debido tiempo.
