Una nueva temporada de Fórmula 1 da sus primeros pasos en el Circuito de Montmeló. Allí, todas las escuderías van a empezar a comprobar si el trabajo invernal ha sido correcto y sobre la pista los coches cumplen lo que apuntan en las simulaciones virtuales, el túnel de viento. Un año que comienza bajo el signo del dominio de Mercedes en la temporada anterior. Y ese dominio es el que el resto de equipos quieren reducir o incluso acabar con él. Aunque posiblemente no sea fácil.
Mercedes apuesta por la continuidad
Porque Mercedes parte de una posición de privilegio y con una ventajas sobre sus rivales que no será sencillo recortar. El trabajo del equipo alemán en las dos últimas temporadas ha sido espectacular (16 victorias en 19 carreras en 2015 lo avalan). Por eso en la escudería de las flechas de plata quieren ir simplemente mejorando pequeños detalles, porque el conjunto es excepcional. Hablan de 'pequeñas revoluciones' las que sufrirá el coche, aunque ninguna radical. Porque mejorar las cifras de 2015 será tarea casi imposible, más teniendo en cuenta que los cambios de normativa no son profundos este año. Pero es que Mercedes parte de la excelencia, con 32 podios de 38 posibles o el 86 por ciento de los puntos posibles.
En Silverstone dieron sus primeras vueltas y en Montmeló tanto Rosberg como Hamilton tendrán que demostrar si realmente todo sigue la senda prevista. Aunque por el bien del espectáculo tal vez sea mejor que no hayan dado con la tecla y al menos podamos ver a otros equipos discutiéndolo la supremacía a la escudería alemana.
Ferrari quiere ganar
Y el primero que quiere discutir las victorias con Mercedes es Ferrari. La escudería italiana fue la única que pudo plantar batalla el año pasado (aunque de manera muy limitada, eso sí) y este año pretenden dar un salto adelante y tratar de pelear por las victorias asiduamente. El SF16-H es el coche con el que pretenden hacerlo. Y Maurizio Arrivaben, el jefe de la escudería italiana fue modesto pero ambicioso al mismo tiempo. El coche, que mezcla el color rojo y el blanco a diferencia de los últimos coches de Ferrari es bonito para Raikkonen, aunque el finlandés prefiere esperar a que esa belleza la demuestre en sus tiempos sobre el asfalto. Desde hoy, en Montmeló, veremos si cumple lo que los tifossi y los responsables de la escudería esperan de él.
Y McLaren necesita una revolución
El que debe cumplir y saltarse muchos pasos en su evolución es el McLaren. La desastrosa temporada 2015 no puede ser repetida este año; por el prestigio de la escudería, por el de sus pilotos y también, por la competitividad del campeonato, que necesita a muchos equipos que puedan hacer sombra a Mercedes. Y McLaren debería ser uno de ellos.
Lo primero que llama la atención en el MP4-31 son sus medidas increíblemente compactas, con un tremendo trabajo aerodinámico en cierto modo revolucionario. Y en McLaren están convencidos de que con este coche las victorias llegarán, aunque no se atrevan a decir cuándo. Pero los responsables del equipo británico reconocen que el trabajo invernal ha sido más que intenso y en él no se han escatimado recursos ni humanos, ni económicos ni tecnológicos.
A falta de comprobar si sobre la pista se confirman las primeras impresiones, es cierto que los dos pilotos del equipo se sienten confiados en que el trabajo de todo el plantel de la escudería acabará dando sus frutos. Realmente tanto el equipo como ellos necesitan que funcione.
A estos nuevos monoplazas se sumarán equipos ya presentados como Renault o Red Bull. Entre todos ellos es posible que se encuentre alguien capaz de ponerle las cosas difíciles a Mercedes. Veremos.