Hannu Mikkola, Michele Mouton, Stig Blomqvist, Walter Rohrl, Bobby Unser, Tom Kristensen, Frank Biela, Timo Bernhard, Jordi y Marc Gené, Miguel Molina… Y una extensa lista de ilustres pilotos más, pueden presumir de haber pilotado a lo largo de la historia para Audi Sport, que nace con la llegada del revolucionario Audi Coupé quattro, un coupé con tracción a las cuatro ruedas que fue presentado en el Salón de Ginebra de 1980.
Aquel deportivo garantizaba una capacidad de tracción por encima de lo conocido hasta la fecha y además con altas dosis de dinamismo. No obstante aquel Audi Coupé quattro nació con el objetivo de competir y en 1981 debuta en el Mundial de Rallyes.
En realidad ya en 1980 se estrenaba como 'coche cero' en el Rally del Algarve y fue cronometrado. Si aquel Audi quattro pilotado por Hannu Mikkola hubiera participado, habría ganado el rallye ¡¡¡ con 26 minutos de ventaja !!! El Audi quattro estaba listo para convertirse en leyenda de los rallyes.
Michele Mouton, la única mujer que ganó un rally del Mundial… con Audi
Audi Sport fichó a Michele Mouton, la primera y única mujer en ganar una cita del Mundial. Fue en el Rallye de San Remo de 1981, y la montura usada, un Audi quattro Grupo 4. La división deportiva de la marca alemana lanzó evoluciones hasta la retirada del Audi quattro de los rallyes en 1986. Modelos como los A1, A2, Sport quattro y el S1, capaz este último de ofrecer cerca de 500 CV de potencia. Y no eran coches cualquiera, eran máquinas pertenecientes al legendario Grupo B.
Estos avances en tecnología se trasladaban a la calle como cuando en 1987 se introduce el diferencial Torsen a los modelos quattro. Audi estaba tan orgullosa de este sistema que todos los modelos de aquella época podían contar con tracción quattro.
A lo largo de estos años, la marca alemana hizo valer su tecnología y consiguió dos títulos de pilotos y dos de constructores antes de su retirada de los rallyes en 1987 participando esa temporada con un Audi 200 quattro.
La tracción quattro también domina la resistencia
Sin embargo Audi ha demostrado que su afamada tracción quattro no es sólo infalible en tierra, sino también en asfalto. Y es que en 2012 Audi se convertía en la primera marca en vencer las 24 Horas de Le Mans con un modelo de tracción a las cuatro ruedas. Era la decimocuarta participación de Audi en la carrera de resistencia más famosa del mundo desde su debut en 1999, y competían con el Audi R18 e-tron quattro, un sport prototipo que alardeaba también de una sofisticada tecnología híbrida de la que deriva la que actualmente utiliza el Audi A3 Sportback e-tron y próximamente el Audi Q7 e-tron quattro y el Audi R8 e-tron quattro.
Audi es toda una referencia en las 24 Horas de Le Mans, pues ha participado en el trazado francés de la Sarthe 16 veces de forma ininterrumpida, logrando 13 victorias y subiendo al podio en 32 ocasiones de 51 posibles en todo este tiempo. Y Audi lo ha conseguido utilizando bólidos impulsados por motores de gasolina con inyección directa FSI, mecánicas híbridas e-tron y también con propulsores dotados de la archiconocida tecnología TDI.
Y es que fueron los pioneros en desmarcarse de sus competidores y apostar por una mecánica diésel para participar en el año 2006 en las 24 Horas de Le Mans. No sólo disputó la carrera, sino que venció, y para demostrar que su mecánica TDI era digna de la alta competición y que aquello no fue ni mucho menos un golpe de suerte, Audi repitió victorias en 2007, 2008, 2010 y 2011con los R10 TDI, R15 TDI y R18 TDI.
A día de hoy, hablar de TDI es hablar de Audi, y de millones de conductores orgullosos del eficiente propulsor que impulsa a sus modelos con los cuatro aros con genes de Le Mans coronando el capó.