El Rolls-Royce Ghost Series II es una actualización de la estética, el equipamiento y de algunos de los componentes mecánicos del Ghost lanzado en 2010. Es una berlina que por tamaño y por precio se sitúa un escalón por debajo del Phantom ya que cuenta con unas medias exteriores de 5,4 m de largo, 1,95 de ancho y 1,55 de alto. Cuenta, al igual que su hermano mayor, con una versión de batalla larga, denominada Extended Whellbase, que crece hasta los 5,57 m de largo. En ambas carrocerías las puertas traseras son de apertura opuesta, un plus de comodidad para acceder a las plazas traseras.
El único motor disponible es, por supuesto, de gasolina, un V12 de 6.6 litros de cilindrada, sobrealimentado con dos turbocompresores y que rinde 571 CV. La caja de cambios asociada al motor es automática de 8 velocidades y utiliza los datos recogidos por el sistema GPS para decidir que marcha engranar en cada momento.
Como todo buen Rolls Royce el nivel de personalización es extremo, con más de 14.000 colores de pintura disponibles o la posibilidad de elegir para la inserciones del interior prácticamente cualquier madera existente.
El Ghost tiene un precio que parte de 305.000 € para la versión corta y 350.000 € para la versión de batalla extendida.