En los últimos tiempos, la Guardia Civil ha intensificado los controles en las carreteras españolas, centrándose en un aspecto que muchos conductores podrían pasar por alto: el contenido del depósito de combustible. Esta medida busca detectar el uso indebido de gasóleo bonificado, especialmente el gasóleo B o agrícola, en vehículos no autorizados. La utilización fraudulenta de este tipo de combustible puede acarrear sanciones económicas significativas, llegando hasta los 6.000 euros, dependiendo de la gravedad de la infracción y de si existe reincidencia.
1¿Qué es el gasóleo agrícola y por qué está prohibido su uso en turismos?

El gasóleo B, conocido comúnmente como gasóleo agrícola, es un tipo de combustible subvencionado destinado exclusivamente a maquinaria agrícola, vehículos pesqueros y ciertos usos industriales. Su precio es considerablemente más bajo que el del gasóleo A, utilizado en vehículos particulares, debido a las ayudas fiscales que recibe. Para evitar fraudes, este combustible se tiñe de un color rojo característico, facilitando su identificación durante las inspecciones .
El uso de gasóleo B en vehículos no autorizados constituye una infracción fiscal grave. Aunque algunos conductores intentan aprovecharse de su menor coste, esta práctica está penada por la ley y puede acarrear consecuencias económicas severas. Además, las estaciones de servicio que suministren este combustible a vehículos no autorizados también pueden enfrentarse a sanciones.