¿Aún no te has enterado? «Una taxista de Barcelona denuncia a un cliente por masturbarse durante el trayecto», hemos podido leer en muchos titulares estas últimas horas. Y es que, en una situación que ha dejado perplejos a propios y extraños, una taxista de Barcelona ha presentado una denuncia ante la Guardia Urbana por un incidente verdaderamente inusual y desagradable. El cliente, durante el trayecto hasta un hotel, se dedicó a realizar actos obscenos en el asiento trasero del vehículo, generando una situación incómoda y repudiable.
La denuncia relata cómo la taxista, en medio de su jornada laboral, se vio enfrentada a un pasajero que, lejos de comportarse de manera respetuosa, optó por una conducta totalmente inapropiada. La mujer, ante tal comportamiento, reaccionó con firmeza y exigió al cliente que abandonara de inmediato el taxi. La confrontación verbal entre la taxista y el pasajero no logró inmutar al individuo, quien, en un principio, parecía indiferente ante las recriminaciones. Sin embargo, finalmente, optó por descender del vehículo y dirigirse al hotel al que se dirigía inicialmente, ubicado en la calle Sepúlveda, en el centro de Barcelona.
1El sector clama contra la desprotección
Este incidente ha desatado una serie de reclamos y protestas por parte del sector de taxistas en Barcelona, liderados por el portavoz de Élite Taxi, Tito Álvarez. Este último ha expresado su hartazgo ante la evidente «desprotección» que enfrentan los taxistas mientras prestan sus servicios y ha instado a la adopción de medidas concretas para abordar esta problemática.
Álvarez ha destacado la falta de medidas de seguridad en los vehículos de taxi, señalando que ni siquiera se les proporciona una pegatina que indique la conexión con la policía. Esta situación ha generado un malestar generalizado en el sector, y Álvarez ha llamado a la acción inmediata para evitar que estos incidentes vuelvan a repetirse.
El portavoz de Élite Taxi ha expresado su preocupación por la situación de desprotección en la que se encuentran los taxistas, destacando que los compromisos para mejorar la seguridad han quedado en un estado de inacción. Aunque no ha anunciado movilizaciones, Álvarez ha advertido que si no se implementan soluciones rápidas en temas como la instalación de cámaras u otras medidas de seguridad, el sector podría tomar acciones contundentes.
