El año pasado, el piloto de Fórmula D Michael «Mad Mike» Whiddett anunció al mundo entero su intención de desarrollar el Mazda 3 más salvaje de todos los tiempos. Una criatura concebida para Pikes Peak que acaba de cobrar vida y cuyas cifras son aún más prometedoras que las anunciadas hace 12 meses. Y es que su particular motor rotativo Wankel genera 200 CV más que los iniciales. Palabras mayores para enfrentarse a la ‘carrera hacia las nubes’.
Y es que cuando Whiddett anunció sus planes con el Mazda 3 prometía que ese particular motor, ligado históricamente a la compañía de Hiroshima y ahora rescatado por la versión R-EV del MX-30, proporcionaría unos 1.200 CV de potencia, que han resultado ser algunos más. Y es que esta criatura esconde un corazón Wankel con cuatro rotores y dos turbocompresores Garrett G40 entre otras muchas cosas para llegar a proporcionar la friolera de 1.400 CV, enviados en exclusiva a sus dos ruedas traseras por medio de una transmisión secuencial con seis velocidades.
El motor Wankel de este Mazda 3 genera 1.400 CV
Será complicado que sus dos neumáticos puedan digerir semejante cifra de potencia, pero es que para ello este Mazda 3 ha sido equipado con un sinfín de enormes apéndices aerodinámicos que generarán unos vitales kilos de carga para pegarlo al asfalto durante su ascenso a Pikes Peak. Y entre ellos destacan su enorme alerón trasero, concebido para trabajar con ese generoso difusor posterior.
Según se dice, todo este kit aerodinámico ha sido diseñado precisamente por la firma de Hiroshima para que el Mazda 3 no perdiera su esencia y se mantuviera todo lo posible con una imagen semejante al de una unidad original. Pero hasta ahí, porque el resto ya habrás comprobado que nada tiene en común con el compacto de la casa nipona.