Pocas son las marcas automovilísticas que actualmente utilizan propulsores de seis cilindros en línea. BMW es una de esas pocas, pues firmas como Mercedes Benz dejaron de emplear estos motores a finales de los años 90, justo cuando lanzaban al mercado los primeros V6. Ahora, casi dos décadas más tarde, la firma de la estrella volverá a ofrecer a sus clientes mecánicas con seis cilindros en línea gracias a esta nueva generación de propulsores modulares que llegarán el año que viene (uno de ellos ya se encuentra en uso).
Con 500 cc por cilindro
Contará con mecánicas de gasolina y diésel, que se ofrecerán con cuatro y seis cilindros, siempre con 500 centímetros cúbicos por cilindro (esto ya lo usa BMW en sus motores TwinPower Turbo y Jaguar Land Rover en los nuevos Ingenium). Una mecánica ya conocida y que inauguró esta generación de propulsores es la denominada OM 654, un propulsor diésel de cuatro cilindros y dos litros que estrenaron los Mercedes E220d y que desarrolla una potencia de 194 CV. Respecto al desaparecido 2.2 diésel, este nuevo motor reduce su consumo un 13%, pero lo más llamativo es la mejora en rumorosidad y vibraciones.
Pero lo que está por llegar es sorprendente, comenzando por el nuevo motor M 256, un corazón que será estrenado en los Mercedes Clase S el año que viene. Este motor de tres litros, seis cilindros en línea y doble sobrealimentación reemplazará a los actuales V6 y V8, pues para comenzar, anuncia una potencia de 408 CV y 500 Nm de par motor. Aquí no acaba la cosa, pues se acompaña de un sistema híbrido de 48 voltios que permite eliminar así la correa de accesorios, pues elementos como el compresor del aire acondicionado, la bomba del agua o de la dirección, son movidos por su motor de arranque/alternador, que a su vez es capaz de proporcionar 15 kW adicionales de potencia y además funciona como regenerador de energía en las frenadas. Por su parte, seguirá contando con un sistema de 12 voltios para alimentar la iluminación exterior e interior o los sistemas de infoentretenimiento.
Añade compresor eléctrico
Este motor M 256 también añadirá un nuevo compresor eléctrico (semejante al que usa el Audi SQ7) que es capaz de alcanzar las 70.000 rpm en sólo 300 milisegundos, de forma que se elimina así el retardo del turbocompresor cuando circulamos a bajas revoluciones.
Nuevo también será el propulsor OM 656, un nuevo motor diésel que nace parejo a este de gasolina y que en este caso proporciona 313 CV de potencia. Su bloque es de aluminio y también apuesta por el recubrimiento NANOSLIDE, de forma que será un 7% más eficiente que el usado actualmente en los 350d.
Los Mercedes Clase S también sumarán un nuevo motor 4.0 V8 Biturbo conocido como M 176. Semejante propulsor generará 476 CV de potencia y 700 Nm de par máximo (su antecesor, un 4.7 V8 generaba 455 CV). Mercedes Benz añade a esta mecánica la desconexión selectiva de cilindros, que estará activa entre 900 y 3.250 rpm, además del mencionado recubrimiento NANOSLIDE, lo que le permitirá ser un 10% más eficiente que su antecesor.
También motores de cuatro cilindros
Pero esta nueva generación de motores de Mercedes Benz también verá nacer nuevas mecánicas de cuatro cilindros, como este M 264. Hablamos de un propulsor de dos litros que ofrecerá una potencia específica de 134 CV/litro (serán así como 270 CV de potencia), de forma que reemplazará a actuales motores de cuatro y seis cilindros de la marca de la estrella. Además de ser potente, será muy eficiente ya que también sumará el sistema eléctrico a 48 voltios. Por si fuera poco, contará también con navegación a vela, regeneración de energía en las frenadas y start-stop inteligente, que incluso detendrá el vehículo cuando circula a bajas velocidades.
