Será efectivamente en la primavera de 2017 cuando el nuevo 5008 llegue a las tiendas, aunque mucho antes, en el Salón de París que abre a finales de septiembre, debutará oficialmente. Lo hará para complementar al nuevo 3008 ya desvelado -19 centímetros más corto- y comparte con él la filosofía SUV, pues la firma francesa cree que a nivel mundial las ventas de este tipo de vehículos seguirán creciendo, mientras que el concepto monovolumen pierde adeptos. Pero nadie debe pensar que esta segunda generación cede en materia de amplitud o funcionalidad, porque lo que sucede es todo lo contrario. Para empezar, el nuevo 5008, que recurre ya a la moderna plataforma EMP2, mide 464 centímetros, que son 11 más que su antecesor, y la distancia entre ejes es muy generosa: 284 centímetros. Eso se traduce en mucho espacio para un habitáculo que tendrá de serie cinco plazas, con la segunda fila compuesta por tres butacas independientes, de igual tamaño -todas con anclaje Isofix- y con respaldo de inclinación ajustable en cinco posiciones. Y estará disponible una tercera fila compuesta por dos butacas independientes muy ligeras -11 kilos cada una- para facilitar su manejo, pues además de plegarse pueden extraerse del vehículo para ganar 60 litros de maletero. El espacio para maletas es otro de los puntos fuertes del 5008, con 780 litros de volumen si usamos sólo cinco plazas, y una longitud máxima de carga de 3,20 metros al abatir el respaldo del copiloto. Además, el plano de carga es muy bajo -a 67,6 centímetros del suelo- y el portón puede ser motorizado con accionamiento 'manos libres', pues pasando el pie bajo el paragolpes trasero se abre o se cierra.
I-Cockpit Amplify. Función de masaje en los asientos
El salpicadero también es totalmente nuevo, pues adopta el nuevo i-Cockpit con pantalla táctil central e instrumentación digital de 12,3 pulgadas, y ofrece una variante evolucionada, el i-Cockpit Amplify, con función masaje en los asientos delanteros y posibilidad de cambiar el ambiente cromático, los sonidos, las fragancias…
El salto tecnológico se percibe también en el equipamiento de seguridad, dotado de lo último en asistentes: freno automático de emergencia, alerta de riesgo de colisión, alerta activa por cambio involuntario de carril, alerta de atención del conductor, encendido automático de luces de carretera, reconocimiento de los límites de velocidad, regulador de velocidad adaptativo con función Stop en las versiones de cambio automático, control de ángulos muertos laterales, Park Assist o control perimetral del vehículo Visio Park con cámaras de 360 grados. Y a falta de tracción total, el 5008 ofrece el Advanced Grip Control, que incluye control de descensos HADC -permite bajar cuestas muy pronunciadas a sólo 3 km/h-, neumáticos específicos M+S para nieve y barro de 18 pulgadas, y cinco modos de adherencia -Normal, Nieve, Barro, Arena y ESP Off- gestionados mediante un mando en la consola.
La gama se articulará en torno a cuatro niveles de acabado -Active, Allure, GT Line y GT- y diez combinaciones mecánicas diferentes, de las que cuatro son de gasolina -1.2 PureTech 130 de cambio manual en versión normal y de bajo consumo, 1.2 PureTech 130 con caja automática EAT6 y 1.6 THP 165 EAT6- y seis diésel: 1.6 BlueHDi 100 manual, 1.6 BlueHDi 120 manual en versión normal y de bajo consumo -ésta anuncia emisiones de 105 g/km de CO2-, 1.6 BlueHDi 120 EAT6, 2.0 BlueHDi 150 manual y 2.0 BlueHDi 150 EAT6.
