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Bugatti EB110 Super Sport. Ni Veyron, ni Chiron…

En el año 1991 Bugatti Automobili Spa todavía no estaba bajo el paraguas de la firma alemana Volkswagen. En ese año un grupo de ingenieros liderados por Romano Artioli, ex-ingeniero de Ferrari y 'padre' del deportivo Lotus Elise muestran el impresionante Bugatti EB110, un deportivo que nacía para conmemorar el 110 aniversario del nacimiento del fundador de la firma de Molsheim: Ettore Bugatti.

Sólo hicieron 126 unidades

Semejante criatura está en producción hasta el año 1995 y de él sólo fabrican de forma artesanal 126 unidades, por lo que hablamos de un vehículo mucho más exclusivo que los conocidos Bugatti Veyron y Bugatti Chiron. También hay menos unidades que de Ferrari F50, Jaguar XJ220, Porsche 959… Todo esto lo ha convertido en toda una pieza de colección, que de momento no ha alcanzado precios desproporcionados en las subastas. Dependiendo de lo que entiendas por desproporcionado.

De todos ellos Bugatti fabricó tan sólo 34 unidades denominadas SS o Super Sport, las cuales eran todavía mucho más singulares que los GT.

Pasaban de 560 a 610 CV

Para comenzar, su corazón 3.5 V12 con cuatro turbocompresores IHI era capaz de generar 610 CV cuando los GT se conformaban con 560. Aún así, esta obra de arte acoplada a un cambio manual de 5 velocidades todavía eroga 890 CV menos que el impresionante 8.0 W16 que utiliza el Bugatti Chiron. Pero el EB110 SS lo contrarresta con un peso inferior a los 1.500 kilos gracias al uso masivo por aquellos entonces de elementos fabricados en fibra de carbono, aluminio, magnesio

También ayudaba a arañar unos cuantos kilos el que las versiones Super Sport no contaran con el sistema de tracción total de los GT. Con todo ello, este deportivo era capaz de alcanzar una velocidad máxima de 347 km/h y de acelerar de 0 a 100 km/h en apenas 3,2 segundos, datos más que suficientes para atraer hasta al mismísimo Michael Schumacher, que tuvo en su poder uno de estos Bugatti EB110 Super Sport.

Esta unidad del año 1993 y pintada en este llamativo color Grigio metalizado cuenta con el número de chasis #006 y se trata de una unidad más especial que sus otros 34 hermanos SS. Y es que se trata de un ejemplar que Bugatti utilizó a comienzos de los años '90 para desarrollar esta versión de altas prestaciones, que finalmente fue reacondicionada y adqurida por un cliente.

A día de hoy cuenta con menos de 9.000 kilómetros en su odómetro y se encuentra en perfectas condiciones. Serán los especialistas de RM Sotheby's quienes le van a buscar un nuevo hogar en el próximo Retromobile de París, que abre sus puertas el próximo 7 de febrero. Entonces encontrará un nuevo dueño que según dicen, habrá tenido que desembolsar entre 850.000 y 1.100.000 euros para hacerse con semejante deportivo. Pero aún es mucho menos dinero de lo que están pidiendo a día de hoy por un Bugatti Veyron, de los que hay 450 unidades o por un Bugatti Chiron, del que en un futuro próximo existirán 500 ejemplares.