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Sebastian Ogier se hace con su tercer título de WRC

Siete pruebas ganadas, solo siete pruebas ganadas le han bastado a Sebastian Ogier para hacerse con su tercer título de Campeón del Mundo de Rallys en la máxima categoría. Con este campeonato, el francés entra en el selecto club de ganadores múltiples en el que Loeb (con 9 títulos en su haber) sigue siendo el monstruo a batir.

Un rally con mucha competencia

Pero conseguir el título de campeón del mundo no ha sido fácil. El francés ha tenido que pasar de la cuarta a la primera posición en los últimos siete tramos del rallye celebrado en Nueva Gales del Sur superando por 12,3 segundos a su compañero de equipo en Volkswagen, Jari-Matti Latvala. Kris Meeke ha finalizado tercero 20,3 segundos más tarde.

«Es una temporada increíble, la mejor de mi vida. No he cometido errores y he tenido buenas actuaciones. Este era el rallye más difícil de abrir pista y nos alegramos de haberlo ganado. Es la manera perfecta de conseguir mi tercer título», ha dicho el francés.

Como siempre, Ogier se enfrentaba a la difícil tarea de abrir pista en las dos primeras jornadas haciendo frente a peores condiciones que el resto de favoritos por culpa de la normativa del campeonato. A pesar de ello, el piloto fue capaz de recomponerse como ha hecho a lo largo de esta temporada, arrebatándole el liderato a Meeke en el último tramo del sabado y no abandonando ese puesto después de las cinco especiales del domingo.

Además, el doblete de Volkswagen en esta prueba ha asegurado el tercer título de marcas para el equipo alemán, no sin antes sufrir un ataque de nervios al encenderse en el coche de Latvala un chivato por problemas en el alternador. Por suerte para el equipo, el finlandés solo tuvo que montar una correa nueva para hacerse con la segunda posición final.

Meeke admitió por su parte que no pudo responder de ninguna manera ante el ritmo mostrado el domingo por los Polo R. Habiendo comenzado la última jornada a tan solo tres décimas por detrás de Ogier y después de haber contado con una posición de salida ventajosa, el británico cayó rápidamente hacia atrás pareciendo que iba a conceder el tercer puesto de la general a Andreas Mikkelsen.

Sin embargo, el noruego cometió un error de novato al llegar tarde a la asistencia del mediodía, recibiendo una penalización de 10 segundos que concedió a Meeke el respiro que necesitaba con su DS 3. Finalmente, el piloto norilandes terminó a 5,9 segundos por delante de Mikkelsen, poniendo fin así a una mala racha de resultados.

Detrás de ellos, se situó Hayden Paddon en quinta posición con el Hyundai i20 para deleite de su grupo de fans, que viajaron hasta Australia por el mar de Tasmania para animarlo. Paddon entró a 16,5 segundos de Mikkelsen después de haberse aproximado por un breve periodo de tiempo a la lucha por los puesto de cabeza en la mañana del sábado.

Ott Tanak fue sexto, a pesar de un ruido en la transmisión de su Ford Fiesta RS, por delante del dueto de Hyundai compuesto por Thierry Neuville y Dani Sordo, terminando ambos séptimo y octavo respectivamente. El español lideró la prueba durante las tres primeras especiales del viernes antes de sufrir problemas en los frenos que le retrasaron en la clasificación.

Elfyn Evans luchó durante toda la prueba por encontrar la confianza. El galés terminó un decepcionante fin de semana en novena posicióncon con su Fiesta RS. El vencedor de WRC2, Nasser Al-Attiyah, fue décimo.

El campeonato mundial vuelve al asfalto para la undécima prueba de la temporada en el Rally de Córcega, que se disputará el próximo mes del 1 al 4 de octubre.