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Previo GP Canadá F1 2015. La carrera que todos temen

«¿Cómo juzgas riesgo contra recompensa entre los muros? La opción es clara, algunos pilotos pasarán limpiamente, y otros intentarán ir a fondo para encontrar algo más. Cuanto más cerca estás, mas rápido irás. Dale un beso al muro y te sentirás muy bien, bésale demasiado fuerte, y todo se ha terminado». El trazado Gilles Villeneuve ofrece unas características singulares para pilotos y máquinas, como nos recuerda Daniel Ricciardo. De hecho, el australiano ganó su primera carrera el pasado año cuando Mercedes perdió por primera vez.

Pronósticos complicados de hacer

Resulta difícil anticipar pronósticos también en esta edición ante los diferentes temores técnicos que albergan los equipos. No parece fácil encontrar el equilibrio perfecto en el Gilles Villenueve. Con zonas de altísima velocidad, sus espectaculares frenadas imponen el mayor desafío en este apartado de todo el campeonato. De hecho, éste fue el punto débil de Mercedes en 2014, cuando sus problemas en esta área afectaron al sistema de recarga de energía.

Si sirviera como precedente, recordemos los problemas del Nico Rosberg al final de la prueba en Bahrein, cuya pista alberga exigencias similares en frenada, perdiendo entonces la segunda posición frente a Kimi Raikkonen. Hamilton pudo controlar la situación desde la primera plaza, aunque también vivió algunos síntomas de desfallecimiento. Cabe imaginar que el equipo alemán haya atacado este punto ante la cita canadiense aunque ¿podría repetirse la misma situación en la próxima carrera?

«Si ves el tercer sector (en Montmeló), es de tracción», explicaba Mauricio Arrivabene tras la decepción de Ferrari en el Gran Premio de España, «no somos ciegos, perdimos medio segundo, y si no somos capaces de solucionar el problema, puede no ser sólo peor en Mónaco (que lo fue en entrenamientos), sino también en Canadá. No quiero ir a Montreal con el mismo problema, de lo contrario será una pesadilla».

Ferrari sufrió en Mónaco con sus neumáticos ante las variaciones y caídas de temperatura ambiental. Con tan largas rectas y la caída de aquella en las gomas al recorrerla, la tracción podría limitar el rendimiento del SF15 T en las numerosas chicanes de este circuito.

Es de suponer que los técnicos de Maranello habrán trabajado para mejorar el grip mecánico en Montreal. Además, como apuntó hace algunas semanas James Allison, se espera que el propulsor italiano incorpore otra evolución de mayor potencia, factor también crucial en este trazado. Sin embargo, a tenor de las últimas carreras, sorprendería que Ferrari se convirtiera en alternativa a los germanos como ocurriera en Malasia. Al menos, sin que medie una precaria fiabilidad mecánica.

La relevancia del propulsor en esta pista también preocupa en McLaren, enfrentado ahora a tres trazados consecutivos de 'cavallería' decisiva. El responsable de Honda, Yasuhisa Arai, reconocía recientemente la necesidad de incrementar el rendimiento de su propulsor pero, también admitía, «no resultaba fácil».

«Creo que en la próxima carrera no daremos un paso adelante en rendimiento porque hay muchas rectas muy largas en Montreal, es un circuito que no nos irá bien», admitía Jenson Button. Se antojaría así complicado repetir entre los diez primeros, especialmente frente a equipos como Lotus y Force India. Aunque cabe recordar que esta pista siempre ha sido una caja de sorpresas, al igual que McLaren esta temporada.

Quizás Williams pueda cuajar un mejor resultado en el clima de respeto que inspira el Gilles Villeneuve. Con un paso atrás frente a 2014, el equipo británico cayó a su punto más bajo en Mónaco. Pero en la isla de Notre Dame podría jugar a su favor la baja carga aerodinámica y menor drag que distingue a su monoplaza. De hecho, desde esta prueba el equipo británico dio un salto cualitativo para el resto de la temporada el pasado año. Felipe Massa era el piloto más rápido sobre la pista cuando sufrió su accidente con Sergio Pérez en 2014. De haber superado al mexicano podría haber logrado la victoria.

«En Canadá volveremos a nuestra posición normal», explicaba Rob Smedley, director de operaciones del equipo británico, «y tenemos novedades a partir de Austria, un circuito que también va muy bien a nuestro coche, como vimos el pasado año». A priori, Williams sería uno de los aspirantes al podio en 2015.

En fechas donde ganan fuerza los rumores de la compra por Renault de Lotus o de Toro Rosso, desde Red Bull y el equipo italiano se mira con temor hacia el trazado canadiense. Ambos están a punto de penalizar por el maltrecho balance de fiabilidad esta temporada, y el déficit de potencia del propulsor francés también podría jugar en contra de los ganadores del pasado año.

En el caso de Toro Rosso, sorprendió su magnífico rendimiento en Mónaco. Muy eficaz en curvas rápidas hasta el momento, el monoplaza de Sainz y Verstappen se desenvolvió cómodamente en un circuito de tracción y alta carga aerodinámica. En este sentido, el magnífico chasis del STR10 dependerá del rendimiento final de propulsor francés, y quizás sea esta la peor pista hasta el momento para el equipo italiano. En esta ocasión, parece que tampoco los entrenamientos deberían ser fáciles para sus dos jóvenes pilotos. Pero si un equipo ha sorprendido esta temporada es, precisamente, Toro Rosso.

Sainz acude a Montreal avalado con cuatro clasificaciones entre los diez primeros y otras tantas en los puntos en las seis primeras carreras. Verstappen no debería permitirse otro error que empañara su magnífica actuación en Mónaco, y cuya reacción en los días posteriores no le ayudó mucho frente a sus colegas. En todo caso, el duelo y el rendimiento de los jóvenes pilotos de Toro Rosso se ha convertido en uno de los atractivos de la temporada, como ya era anticipado.

Expectativas, incertidumbres y temores se alternan a partes iguales ante el Gran Premio de Canadá ¿Para quién será la victoria? Que esta pregunta sea posible antes de su celebración no deja de ser una buena noticia.