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G.P. de México. Como el fútbol: el arbitro, las faltas y sus sanciones, los protagonistas

Bernie Ecclestone llegó al Gran Premio de México pidiendo que el asfalto de los circuitos se rodeara de muros para dar más emoción a las carreras ante el respeto que impondrían a los pilotos,  en oposición así a esos circuitos asépticos y de amplias escapatorias que tanto perdonan a los pilotos. Una de tantas «boutades» que gusta de soltar para revolver al personal. Sin embargo, más de uno debió pensar sobre ello a tenor de lo vivido en el Hermanos Rodríguez.

Porque fue precisamente la libertad con la que actuaron algunos pilotos con los límites de pista y las decisiones de los comisarios las que crearon gran polémica en el gran premio. Profusamente aderezada, además, por el toque personal de Sebastian Vettel por la radio. Porque la cita del Hermanos Rodríguez terminó acercando a la Fórmula 1 más al fútbol más que a cualquier otro deporte.

Más propio de un partido de fútbol

Jugadas polémicas y discutidas discusiones arbitrales (mensajes de radio aparte) acabaron copando la mayor atención en el Gran Premio de México, afectando de una manera definitiva al resultado. Salida de pista de Hamilton en la primera vuelta, maniobra de Verstappen sacando a Rosberg un par de segundos después, pasada de frenada del holandés defendiéndose de Vettel , retención posterior al alemán para que Ricciardo le pudiera atacar, la defensa del piloto de Ferrari ante el ataque al australiano, sanción a Verstappen a punto de subir al podio… La excesiva monitorización que sufre la Fórmula 1 y la falta de consistencia en la gestión del comportamiento en pista se convirtieron en los grandes protagonistas en el Hermanos Rodriguez, como el árbitro, las faltas, y la diferente forma de sancionarlas. O no.

En el terreno deportivo, Lewis Hamilton salvó su primera bola de partido frente a Nico Rosberg, mientras que el alemán también se acercaba un poco más al título, que puede rematar definitivamente si consigue la victoria en la próxima cita de Brasil. Sin embargo, el piloto alemán no tuvo respuesta alguna a su rival durante todo el fin de semana.

Desde que encadenara su ristra de cuatro victorias consecutivas a la vuelta del verano y alcanzara los treinta y tres puntos de ventaja, el péndulo parece haberse movido hacia el lado del británico. Conservadurismo, miedo escénico o simple inferioridad, Rosberg pudo haberlo pasado realmente mal de no haber logrado esa vuelta final del Q3, cuando era superado incluso por los Red Bull. Salir en primera línea fue clave para lograr defender sus opciones al título porque, de no haber sido así, Hamilton le hubiera reducido aún más la diferencia de 19 puntos que ahora les separan, evitando que Rosberg tenga su primer «match ball» directo para la próxima cita.

Duelo entre españoles

En cuanto a Fernando Alonso y Carlos Sainz,  frente a su duelo de Austin, se repitió otro en el Hermanos Rodríguez, pero con una dinámica  correosa, gris, y sin la menor recompensa para ambos. El nivel tanto del Toro Rosso como McLaren ha ido convergiendo desde puntos de partidas opuestos al principio de temporada, para ahora luchar directamente ambos equipos en la clasificación de Constructores, con Alonso y Sainz como adalides de cada uno sobre el asfalto.

Todo pudo haber terminado en la tercera curva si Alonso no hubiera conseguido controlar su monoplaza de forma milagrosa, cerrado precisamente por el propio Sainz, en una maniobra que pudo haber terminado de forma dramática para el asturiano contra los muros, «a 300 km/h», y con el resto de los monoplazas lanzados por detrás.

Alonso quedó atrapado durante casi toda la carrera detrás de Sainz por culpa de ese cerrojazo de la primera vuelta, lo que le impidió superar durante gran parte de la carrera a un monoplaza que llevaba un paracaídas abierto en Austin por su falta de potencia. Por su parte, Sainz sufría con el cambio y los frenos desde la primera vuelta, se tocó con Massa y dañó su alerón.  Ambos terminaron fuera de los puntos en una carrera ingrata. Y ambos, seguro, estarán deseando ya que termine definitivamente esta temporada.